Sin embargo, advirtió que América Latina necesita avanzar en la capacidad de innovación, el otorgamiento de valor agregado a sus productos y la gestión de los recursos naturales en función del desarrollo.
Entrevistada por la televisión cubana, Bárcena llamó la víspera a la creación de nuevas áreas productivas que generen nichos económicos importantes, pues la estructura actual de la región representa una debilidad para la diversificación.
Dijo que la brecha productiva constituye un freno para el avance del subcontinente, pues sectores de alta productividad, conectados con los avances tecnológicos, coexisten con pequeñas y medianas empresas que poseen muy bajos niveles.
Según la experta mexicana, aunque el área se está desacelerando, el proceso no se da con la misma velocidad que en los países desarrollados, porque cuenta con un grupo de factores propicios para afrontar la situación.
Consideró bastante favorable el balance de la deuda externa, con la excepción de los muy endeudados países caribeños de habla inglesa, pues las naciones han sabido preservar sus finanzas públicas y siguen creciendo las exportaciones.
Por otra parte, Bárcena consideró muy atinados los lineamientos económicos y sociales acordados en la isla, por su voluntad de profundizar en el desarrollo económico y social y la igualdad social.
También, entre otros aspectos, por la importancia que conceden al fomento de una cultura tributaria, pues es un acto de ciudadanía política que cada persona contribuya con el fisco, según sus ingresos.
Eso es lo que está faltando en países de América Latina, lo que limita el desarrollo económico, comentó.
Tras opinar que el sistema cubano es solidario por definición, dijo que uno de los grandes desafíos de Cuba radica en preservar los logros de la Revolución en materia de salud, educación e igualdad social