Oaxaca, México.- Bajo el lema “Un suelo sano sostiene tu vida”, la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR) conmemoró este 17 de junio el Día Mundial de Lucha contra la Desertificación y la Sequía, fecha que fue instituida en 1994 por la Asamblea General de las Naciones Unidas para fomentar la conciencia pública sobre el tema.   Al encabezar el acto inaugural de esta jornada, realizado en Santa Ana del Valle, el gerente estatal de la CONAFOR, Ricardo Ramírez Domínguez, detalló que la desertificación es la degradación de la tierra y de la vegetación, la erosión de los suelos, así como la pérdida de la capa superficial del suelo y de las tierras fértiles en las zonas áridas, semiáridas y subhúmedas secas, causada principalmente por las actividades humanas y por las variaciones del clima. El funcionario federal señaló que por ser el suelo la clave para asegurar el agua, la energía y para construir resiliencia al cambio climático, es necesario realizar acciones que contribuyan a evitar la creciente pérdida de tierra.   Ramírez Domínguez apuntó que esta fecha también sirve de marco para la celebración del aniversario de la adopción de la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación (CNULD), por ello la CONAFOR cada año organiza en esta fecha alguna actividad que promueva acciones enfocadas a combatir la degradación de la tierra.   El servidor público indicó que para el presente año el lema es “Un suelo sano sostiene tu vida, vamos por una tasa cero de degradación de la tierra”, y tiene como objetivo resaltar los esfuerzos requeridos para asegurar el manejo sostenible de la tierra en el largo plazo.   Así lo expuso ante el presidente municipal de Santa Ana del Valle, Enrique Sánchez Morales; el presidente del Comité de Vigilancia del Comisariado de Bienes Comunales, Jaime García García; el subgerente de Conservación y Restauración de la CONAFOR, Oscar Mejía Gómez; el director del Centro de Educación y Capacitación Forestal 02 (CECFOR), Francisco Maldonado Robles; así como estudiantes de dicha escuela y comuneros de la población anfitriona.   Tras la inauguración, Gerardo Calderón Pérez y Arturo Franco Alonso, quienes laboran en el área de Suelos de la CONAFOR, ofrecieron las conferencias tituladas “Principales acciones para la conservación de suelos” y “Obras y prácticas de conservación de suelos realizadas en Santa Ana del Valle”, sucesivamente.   Al concluir las exposiciones, las y los asistentes se trasladaron al paraje Geu daanni, encabezados por el presidente del Comisariado de Bienes Comunales, Frumencio Bautista, para conocer las obras que han efectuado los comuneros y llevar a cabo una práctica de campo.   La degradación de suelos en Oaxaca   El gerente estatal de la CONAFOR anotó que en Oaxaca la región Mixteca es la que presenta un mayor deterioro ambiental a consecuencia de un proceso histórico de cambios en la estructura social y productiva que se remonta a la época Prehispánica en donde sus habitantes hacían uso y explotación de sus recursos naturales para lograr la autosuficiencia.   Agregó que con la Conquista Española se agravó el proceso de deterioro y en consecuencia se aceleró la destrucción de los sistemas agrícolas prehispánicos, especialmente el de terrazas, aunado a la tala de los bosques para construcciones coloniales y la introducción de ganado, principalmente bovino y caprino. Estas actividades se conjugaron con la fragilidad de los ecosistemas, lo que desató un proceso acelerado de erosión.   Cabe apuntar que de las 9.3 millones de hectáreas con que cuenta el estado, la superficie de la Mixteca es de 1.6 millones de hectáreas. Está integrada por 155 municipios distribuidos en los distritos de Nochixtlán, Tlaxiaco, Huajuapam, Coixtlahuaca, Teposcolula, Juxtlahuaca y Silacayoapam.   En la mayoría de los distritos predomina la existencia del suelo con un alto índice de erosión, debido a la topografía agreste, escasa vegetación y al mal manejo del suelo. De acuerdo con estudios realizados por la Universidad Autónoma de Chapingo, de la superficie total: 13.3 por ciento registra un muy alto grado de erosión, el 46 por ciento alto grado de erosión; el 38.7 por ciento erosión moderada; y sólo el 2 por ciento de la superficie presenta erosión leve.