Oaxaca, México.- La desesperación superó la timidez de Alfonso Sosa, un padre de familia de 25 años que con seguridad tomó el micrófono para expresar al candidato a diputado federal por el Distrito 08 de la alianza PRD-PT-MC, Hugo Jarquín, su decepción por la falta de empleo, pero también su confianza de que al llegar Andrés Manuel López Obrador a la Presidencia de la República las cosas en el país van a empezar a cambiar:
“Soy albañil, tengo esposa y una hija de cinco años a que desde mayo esperan que yo encuentre trabajo, pero hoy no tengo ni para comprar tortillas. Las galletas y el refresco que me brindaron aquí los vecinos es todo lo que traigo en el estómago”, narró en una reunión vecinal que Hugo Jarquín propició en la Colonia Ampliación Independencia, en Santa Cruz Xoxocotlán, como parte de sus recorridos de campaña.
Con la decepción reflejada en un rostro que en los últimos 40 días ha recibido sólo negativas como respuesta a sus intentos de emplearse en el área de la construcción, Alfonso Sosa no puede evitar disculparse, para él, compartir su difícil situación económica es visto como una imprudencia, sin embargo el desahogo le ayuda para externar su confianza en el proceso electoral del próximo 1 de julio.
“No me agüito, pero tenía que decir por lo que estoy pasando, la situación para quienes trabajamos en la industria de la construcción es muy complicada, muchos como yo no encontramos trabajo, por eso voy a depositar mi confianza en Andrés Manuel López Obrador y en Hugo Jarquín, sé que ellos van a procurar que personas como yo tengamos empleo”, externó Alfonso Sosa.
Al escucharlo, el candidato de los partidos de izquierda entendió con claridad a que se refería ese joven padre de familia: “Yo vengo desde abajo, de niño cuide chivos, viví en una casa humilde y no olvido mis orígenes. Como ustedes sé lo que se siente al no tener qué comer o no encontrar empleo, por eso hoy lucho por representar a la ciudadanía de Oaxaca en el Congreso, para contribuir a que su situación actual empiece a cambiar”.
Recordó que precisamente uno de los cuatro ejes de su proyecto legislativo es el empleo, una de las demandas más sentidas de la población que en el 2006 fue engañada por un candidato que dijo que sería el presidente del empleo y que en realidad ha propiciado un déficit superior a los cuatro millones de empleos formales durante el actual sexenio.
“Ni Andrés Manuel López Obrador y yo les vamos a mentir porque conocemos y compartimos las necesidades de la gente. Lo que queremos es lograr un cambio verdadero, que la pobreza deje de ser simplemente administrada por las autoridades y los recursos públicos se ejerzan realmente a favor de la población”, dijo convencido el aspirante a diputado federal.
El compromiso concreto, explicó, es que una vez que Andrés Manuel López Obrador sea electo como presidente, impulse la creación de 7 millones de empleos. “Quienes lleguemos al Congreso de la Unión vamos a contribuir a que ello sea posible y que no haya familias, como la de Alfonso Sosa, que no tienen ni para comprar tortillas por falta de oportunidades laborales”, afirmó.
Por ello, exhortó a la ciudadanía a votar por las y los candidatos de la coalición Movimiento Progresista, quienes al igual que el candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador tienen el compromiso real de cambiar la situación del país y reducir los índices de pobreza que a su paso por el poder han propiciada la clase política corrupta, lo que explica por qué sus candidatos van en picada.