Jóvenes autores revisitan el legado literario de Daniel Sada
Reconocido como un escritor cuyo tono satírico y prosa única se alejaron de la solemnidad y corrección política, Daniel Sada, autor de una vasta obra que incluye novela, poesía, cuento, ensayo y artículos periodísticos, es abordado con la visión de las nuevas generaciones en las que su pluma dejó una huella indeleble.
Editado por la Dirección General de Publicaciones (DGP) del Conaculta, en el Fondo Editorial Tierra Adentro, La escritura poliédrica. Ensayos sobre Daniel Sada, con introducción y compilación de Héctor Iván González, permite también, al lector, adentrarse en el “paisaje interior” que Sada construyó a lo largo de su vida; aquél en el que sólo cabía la literatura verdadera, comprometida, perdurable.
Los ensayos que componen el libro son de la autoría de Ana Sabau, Alfonso Nava, Nicolás Cabral, Antonio Ramos Revillas, Antonio Nájera Irigoyen, Alfredo Lèal, Jorge Luis Boone y Luis Felipe Pérez Sánchez.
El autor fallecido en noviembre de 2011, “ocupa un lugar central” entre el conjunto de escritores que han abandonado la postura acartonada, “que se han alejado del internacionalismo (¿o debemos decir esnobismo?) ‘doblemente folclórico’, y que lo han hecho tanto desde el verso como desde la prosa”, refiere Iván González en el texto introductorio.
“Su antiintelectualismo se manifestó de muchas maneras; particularmente se volvió el motor de los asuntos que abordaba en su obra: casi todos surgían de una necesidad subjetiva personal. ‘Es que yo no escojo mis temas… los temas a uno se le imponen’, declaró con una firmeza notable”.
Su disciplina férrea y rigor inusitado en nuestras letras mexicanas lo convirtieron en un autor respetado por la mayoría de la comunidad, no sólo de escritores, sino de artistas en general, como pintores o cineastas, agrega el compilador.
Ganador también de los Premios Xavier Villaurrutia, José Fuentes Mares y, justo previo a su muerte, del Premio Nacional de Ciencias y Artes 2011, en la categoría Lingüística y Literatura, Daniel Sada fue celebrado rápidamente desde sus primeros libros por escritores de generaciones anteriores a la suya.
Carlos Fuentes, Álvaro Mutis y Eduardo Lizalde se cuentan entre quienes aplaudieron su escritura. “El reconocimiento a Sada alcanzó tales dimensiones que cuando el crítico norteamericano Harold Bloom visitó nuestro país para recibir el Premio Alfonso Reyes lo incluyó en el puñado de autores mexicanos que le interesaban”, recuerda Iván González.
Para algunos autores de su generación Sada fue una figura incómoda, pues al tiempo que alcanzaba un amplio reconocimiento en 1999 con la aparición de Porque parece mentira… “había un silencio por parte de algunos de sus coetáneos que no terminaban de aceptar que alguien llegara a cambiar, a desordenar, a moverles el tablero de la literatura”, asegura el escritor, quien agrega que dicho silencio se fue diluyendo mientras las críticas elogiosas hacia Daniel comenzaron a provenir de Latinoamérica y España.
“Dilucidar la verdadera valía, la adecuación entre la realidad y los espaldarazos innecesarios, lo dicho por los comentadores y lo hecho por el escritor, es uno de los reparos que ponen algunos lectores críticos para juzgar a Daniel. Ya que éstos, al encontrarse frente a la aprobación generalizada, prefieren buscar por otro lado y leer cosas menos recomendadas.
“En gran medida, el tomo que el lector tiene en las manos busca explorar esta obra, pues el abordaje que emprende en el libro esta generación de jóvenes escritores ya es un inicio crítico, una lectura seria, una aproximación rigurosa a una obra que tiene un fuerte peso y un largo porvenir en nuestras letras”, afirma Héctor Iván González.
La escritura poliédrica. Ensayos sobre Daniel Sada será presentado como parte de las actividades de la XXII Feria Internacional del Libro de Monterrey, el sábado 13 de octubre a las 16:30 horas, en Arcada CINTERMEX (avenida Fundidora 501, colonia obrera, Monterrey, Nuevo León). Comentarán la obra Antonio Ramos, Zaira Eliette Espinosa y Héctor Iván González.