Con funciones el martes 3 y jueves 8 de mayo a las 18:00 horas, y el domingo 6 y 13 de mayo a las 17:00 horas, la producción realizada en colaboración con el 28 Festival de México (FMX) cuenta con la dirección concertadora de Guido Maria Guida, la puesta en escena e iluminación de Sergio Vela, el diseño de escenografía de Philippe Amand y la participación del tenor Carlo Scibelli, las sopranos Rebeca Nash, y Olga Sergeyeva, la mezzosoprano Malgorzata Walewska, el bajo barítino Noé Colín y el coro y la orquesta del Teatro de Bellas Artes.
La ópera con una duración de cuatro horas y media incluyendo intermedios es conocida por representar grandes desafíos musicales y vocales que exigen altas tesituras, agudos de extrema dificultad y fuerza sonora.
El director concertador, Guido Maria Guida explicó que los retos comienzan con el libreto cargado de simbolismos. En cuanto a la música recordó que Strauss posee una técnica compositiva llena de virtuosismo orquestal que requiere la participación de una orquesta de cien personas para generar una explosión de sonidos en cinco líneas musicales y cerca de 50 motivos conductores utilizados de manera polifónica, lo que representa un aspecto rítmico difícil de coordinar.
En palabras del director de la puesta en escena, Sergio Vela, La mujer sin sombra es un cuento de hadas que admite muchas lecturas sin ser superficial al tener un grado de profundidad y complejidad en su significación.
Se trata de la hija del Rey de los Espíritus que tiene la capacidad de transformarse en cualquier animal y cuando el emperador va de cacería su halcón atrapa una gacela blanca que se convierte en ella. Este encuentro suscita una pasión amorosa desenfrenada pero estéril ya que después de doce lunas de casados ella no consigue embarazarse, por lo que no proyecta sombra lo que significa que no es plenamente humana.
El plazo señalado por el Rey de los Espíritus para que quede embarazada está por vencer, de lo contrario tendrá que volver al reino de su padre y el emperador será petrificado, por ello, con ayuda de una nodriza descienden al mundo de los humanos para tratar de comprar una sombra a una mujer que no quiere tener hijos y esté dispuesta a negociar su humanidad.
“La obra trata todo este largo camino iniciático de humanización, de una serie de pruebas que tienen que irse venciendo para lograr la plena humanización y el encuentro final de las parejas. Además está el rechazo total y radical a la manipulación cruel contra la humanidad de parte del personaje de la nodriza”, consideró Vela.
En cuanto la propuesta escenográfica de Philippe Amand, Vela agregó que se contará con pocos elementos visuales pero con una fuerte significación y carga simbólica que incluye reproducciones de piedras realizadas por el artista Jorge Yázpik.
“Hemos trabajado mucho en la concepción del espacio tratando de encontrar los elementos indispensables. Me parece que todo lo que está en un escenario debe significar algo, no me atrae que haya elementos prescindibles, accesorios o meramente decorativos, sino elementos necesarios para contar la historia y que tienen una carga simbólica muy marcada”. La mujer sin sombra se presentará el martes 3 y jueves 8 de mayo a las 18:00 horas, y el domingo 6 y 13 de mayo a las 17:00 horas en la sala principal del Palacio de Bellas Artes ubicado en Av. Juárez Esquina con Eje Central en la colonia Centro. Precios: $650, $500, $400, $250 y $150. Duración 4 horas con 30 minutos (incluye dos intermedios de 30 minutos).