Fortino TORRENTERA O.
Oaxaca. México. La curtiduría con larga historia que identificó a Jalatlaco, el más antiguo barrio de esta capital, llegó a su fin, por ello vecino rindieron tributo a este antiguo oficio.
Así, el Comité de Vida Vecinal (Comvive) organizó del 26 al 30 de marzo la Primera Semana Cultural de Jalatlaco, con la que se busca revalorar ese oficio y destacar los elementos culturales que distinguen a ese histórico barrio.
En opinión del presidente del Comvive, Guillermo Reyes Navarro, estas actividades que surgen de la iniciativa de la ciudadanía, además de revalorar la esencia de ese barrio, busca crear conciencia entre las nuevas generaciones sobre esos valores.
Un personaje importante en esta iniciativa ha sido el doctor Margarito Navarro, ex presidente del Comvive, quien ha ido recopilando parte de la historia de ese barrio.
Recordó que Jalatlaco es originalmente el primer asentamiento mexica en este valle, además de haber sido la primera sede del Ayuntamiento capitalino en el edificio que hoy ocupa el Jardín de Niños.
Jalatlaco, es originalmente la primera sede del Ayuntamiento capitalino, antes de que se construyera la ciudad, además de ser uno de los barrios prehispánicos, como lo atestigua su templo del siglo XVII, apuntó.
Con una arquitectura colonial distintiva a lo largo de su territorio, Jalatlaco cuenta con un templo de siglo XVII, que testimonió el paso del tiempo en estos siglos, sumado al carisma que ha distinguido a ese barrio.
El doctor Navarro, lamentó que siendo la curtiduría la principal vocación que sigue distinguiendo a esa barrida, esta actividad se haya perdido, con lo cual concluye un ciclo histórico en ese sector citadino.
En su investigación, asienta que según registros de finales del siglo XIX donde se establece que de dos mil habitantes en la ciudad, 77 se dedicaban a esa actividad artesanal, por lo que alrededor de 1935 en ese barrio se encontraban activas unas 40 curtidurías.
A causa de la demanda que produjo la Segunda Guerra Mundial, la curtiduría cobró un auge entre las décadas de los 40 a los 60, distinguiendo a ese barrio el olor de las curtidurías y de los corrales vacunos y sólo uno de sus productores llegó a exportar hasta 8 mil pares de huaraches en una sola semana.
[caption id="attachment_160343" align="alignright" width="300" caption="El doctor Margarito Navarro, organizador de la exposición."]
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En su recopilación histórica, cita al señor Juan José de la Cajiga quien consideró que el ocaso de esa industria se debió al decremento de la calidad del producto, al introducir el cartón en lugar del cuero para las sales, así como la deficiente calidad del curtido que provocaba mal olor en el huarache, al igual que la introducción de del vinil, factores que derrumbaron las exportaciones.
También asienta que las últimas dos curtiduría cerraron en 2004, la del señor Matías Navarro y la más reciente en diciembre pasado del señor Ismael Martínez y que se localizaba en la calle de Refugio con lo cual termina un ciclo histórico, el de la era de la curtiduría.
Por ello durante esta semana cultural se montó una exposición en la explanada del templo, en la cual pudieron verse los implementos utilizados, al igual que piezas tales como las últimas fajillas, tableros, paletos, baquetas y baquetones producidos, aunque aclaró que la última curtiduría de Don Ismael Martínez ahora sólo trata pieles finas.
“Esta exposición marca el fin de la era de la curtiduría en Oaxaca y especialmente en este barrio en el que por muchos años se convirtió en una de las actividades productivas más importantes”, comentó.
También en ella se muestra una serie es dedicada a la intensa actividad cultural que distingue a este barrio, entre las que se cuenta la tradicional comparsa de muertos, los agraristas, la vida cotidiana, el proceso de la curtiduría, entre otras imágenes.
Uno de los personajes más recordados en ese barrio, a “Kid Curiel” destacado deportista que en 1945 obtuvo el campeonato estatal de boxeo y de quien se mostró por primera vez su bata y equipo deportivo, además de equipos o otros atletas salidos de esa histórica demarcación.
Durante esta muestra, familias avecindadas se acercaron para aportar fotografías y artículos identitarios que obligan a que en el próximo año esta muestra se amplíe, “pues nos interesa hacer saber a la sociedad que Jalatlaco es un barrio con una cultura viva”, concluyó.
La Semana Cultural impulsada por dos entusiastas vecinos, el doctor Margarito Navarro y el arquitecto Mario Reyes programaron el pasado lunes con la presentación de una estudiantina y una narración sobre la historia de este tradicional barrio, a cargo del citado galeno.
Para el martes, se presentó la Danza de la Pluma y Flor del Naranjo; la primaria 21 de agosto escenificaron una obra de teatro; un coloquio de oficios, así como la presentación de la obra “Historia de curtidores” a cargo del Grupo Cuahupanco.
Además de un concurso de canto, recitales de música instrumental y bailes, el miércoles 27, Cuahupanco ofreció un espectáculo teatral, así como la presentación de “Jalatlaco, leyenda viva” al día siguiente y la presentación del proyecto del paseo turístico Jalatlaco-Santo Domingo.
La semana cultural concluyó con un tequio en las escuelas de la zona, recitales musicales y la representación de “Jalatlaco, leyenda viva”, la cual fue ovacionada por los asistentes.