En la obra del artista nacido el 13 de diciembre de 1920 en Monterrey, yace un humor crítico de lo mexicano y una contemplación de la vida sin tanta solemnidad. Su admirable trabajo tuvo cabida en importantes publicaciones de México y el extranjero, como el diario Ovaciones, Cine Mundial, Últimas noticias, Novedades, La Jornada, The New Yorker y The New York Times.

A 92 años de su natalicio, Conaculta recuerda al creador de los personajes El Charro Matías, Gastón Billetes y El Tapado, mediante un acercamiento a su obra ahora sistematizada por la Abel Quezada Asociación Civil (AQAC) que ha digitalizado el trabajo desarrollado por este creador a lo largo de 50 años.

El archivo fue conformado de manera formal el 13 de marzo de 1996. En entrevista, Abel Quezada hijo comenta que desde entonces se ha venido desarrollando un trabajo profesionalizado para organizar y digitalizar el legado de su padre.

“Encabezados por mi madre, (Yolanda Rueda de Quezada) todos sus hijos (Abel, Josefina y Marta Yolanda), cooperamos en la creación del archivo y de la AQAC. Siempre pensamos que teníamos que cuidar el acervo que nos dejó, vimos diferentes formas de cómo documentarlo y gracias a la exposición que hicimos en el Museo Tamayo en 1999 surgió la idea”.

La base de datos abarca 11 mil 72 registros y está integrada por cuadernos de viaje, caricaturas, apuntes, trabajos publicitarios, fotos, material de video y DVD. También se cuenta con notas periodísticas recuperadas de hemerotecas y obras originales para su posterior digitalización y catalogación. El trabajo curatorial ha sido por cuenta de Alfonso Morales.

El archivo se localiza físicamente en Cuernavaca. Para su conformación se contó con apoyo gubernamental: “El Fonca nos ayudó hace un par de años a través del programa de Fomento a Proyectos y Coinversiones Culturales en completar el registro y la digitalización, así como revisar y restaurar algunos materiales tanto de obra periodística como pictórica, aún no hemos terminado pero debemos seguir para tenerlo actualizado.

“Hicimos una página en internet [www.abelquezada.org.mx] que no está muy completa. Estamos en un proceso, nos gustaría que esto fuera lo más público posible, que más gente tuviera acceso al acervo periodístico. En eso estamos trabajando, viendo donde sería el lugar y forma para que la gente tenga acceso a este trabajo, que consideramos importante porque representa 50 años de la historia de México”, detalló.

Quezada hijo subrayó que el archivo, fechado entre 1945 y 1989, se encuentra en lo que fue el estudio de su padre, casa de una de sus hermanas. Cuenta con un perfil en Facebook pero aun así la gente tiene acceso de forma limitada al material. En el sitio web se puede consultar el archivo mediante seis secciones: obra hemerográfica, archivo personal, producciones AQ, hemeroteca, fototeca, filmoteca y biblioteca; así como por personaje y fecha, por evento, por tema, y otros.

El heredero del caricaturista agregó que aún hay cosas personales de su padre que les gustaría dar a conocer: “Sería una pena no compartir los cuadernos de viaje, que son algunas joyitas que hemos encontrado, nos gustaría hacer un facsimilar de piezas bonitas y representativas de la obra personal de mi padre”.