CIMAC Oaxaca, México.- Más de 80 organizaciones de la sociedad civil solicitaron a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que realice una visita a México, para constatar la emergencia que enfrenta el país en materia humanitaria y emita un informe para obligar al Estado a tomar las medidas pertinentes. Al término de una audiencia ayer de la CIDH, en Washington, las agrupaciones entregaron a los comisionados un informe sobre la situación de los Derechos Humanos (DH) en México. El reporte fue elaborado por Asociadas por lo Justo, el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, y la Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos “Todos los Derechos para Todas y Todos”, entre otras organizaciones. Los grupos ciudadanos recordaron que Amnistía Internacional advirtió la ausencia de acciones para garantizar la protección de los DH por parte de Enrique Peña Nieto, ya que las pocas medidas que ha tomado no están a la altura de la gravedad de la situación. En el informe las y los activistas asientan que durante el sexenio de Felipe Calderón entre 60 mil y 100 mil personas fueron asesinadas, 25 mil fueron desaparecidas, y miles fueron desplazadas de manera forzosa, además de que las y los defensores de DH y periodistas han sido perseguidos o asesinados. A lo anterior se suma el uso sistemático de la tortura y la fabricación de culpables, los secuestros de miles de migrantes, la persistente violencia contra las mujeres en ámbitos públicos y privados, el saqueo al medio ambiente, entre muchos otros abusos que no son investigados por el Estado mexicano y que, por ende, no resarce los daños a las víctimas de violaciones de DH. La última vez que la CIDH visitó México para elaborar un informe de la situación humanitaria fue en julio de 1996, lo que incidió para que el gobierno federal, a partir del año 2000, impulsara programas y acciones para cumplir con los acuerdos internacionales en materia de DH. Desde 2009 el Estado mexicano ha sido sancionado por la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CoIDH) en cinco ocasiones, por violaciones a las garantías fundamentales. Tan sólo en 2012 –dijeron las organizaciones–, México fue el país que mayor cantidad de denuncias registró ante la CIDH, con mil 800 casos. Las agrupaciones solicitaron a la CIDH que visite México a la brevedad y advirtieron que la reforma constitucional, que garantiza la protección de los DH, está en riesgo por iniciativas de contrarreforma que impulsan legisladores del PRI. Advirtieron que en México siguen pendientes reformas relevantes respecto al fuero militar, la tipificación de la desaparición forzada, la aplicación correcta del Protocolo de Estambul para identificar daños físicos y psicológicos en las víctimas de la tortura, y garantizar la protección de las y los defensores de DH y periodistas. Las y los activistas pidieron también que se incluya la perspectiva de género en la Ley de Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas, ya que el gobierno no atendió la recomendación del Comité de la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer, y por tanto no hay indicadores específicos que visibilice la situación de las mexicanas.