Oaxaca, México.- La edición digital es un tema global, por lo que no tiene ningún sentido que los editores trabajen según el avance tecnológico de su país, pero es importante que tengan una visión local. Las aplicaciones en España no pensaban venderlas sólo en España, están pensadas para diferentes idiomas y mercados, expuso Lluis M. Abián, durante la primera sesión del taller Libro digital ilustrado que dio en el marco del Tercer Simposio Internacional sobre Libro Electrónico. La cadena del libro en el mundo digital
El taller tiene como objetivos: conocer el proceso de edición y producción de un libro digital ilustrado; que los participantes, según su proyecto, decidan qué solución técnica es la más adecuada y trabajar la conceptualización de una story-app y el desarrollo de un plan de producción a partir de casos prácticos.
En la primera de tres sesiones, el fundador de la productora digital iLUBUC dio una introducción sobre los formatos en aplicaciones para dispositivos móviles, web apps, ebooks, audio libros, a los dispositivos de lectura como tablets, e-readers, computadoras, así como el software de diseño y programación.
El integrante de la junta de la Asociación Profesional de Ilustradores de Cataluña compartió que el taller busca que cada asistente vea que sus proyectos son viables y que pueden tener difusión a nivel internacional.
“La mayoría de las aplicaciones acaban siendo los cuentos de Charles Perrault o los Hermanos Grimm, lo importante es crear contenido nuevos, si aquí en México tienen nuevas ideas no importa la tecnología aunque estén atrasados, poco a poco pueden crear contenidos”, aseguró.
Señaló que los interesados en la producción de libros digitales, además de hacer un estudio sobre viabilidad electrónica, tienen que evaluar cómo está el mercado tecnológico para elegir cuál es la solución técnica más adecuada.
“Para alguien que es muy creativo a lo mejor puede ser un tema muy pesado, pero que no podemos evitar. En proyectos digitales siempre necesitas un equipo, existen muy pocos proyectos desarrollados por una sola persona. Si hay temas muy técnicos que no se entienden es importante buscar a algún colaborador o amigo que lo pueda resolver”.
El especialista en diseño web apuntó que con el taller también animará a los interesados para que hagan un poco de investigación tecnológica, ya que tendrán más autonomía a la hora de desarrollar su proyecto y no depender de otras personas.
Para el desarrollo del taller solicitó a los participantes realizar un proyecto para trabajarlo como punto de partida en el que se incluya idea, objetivos, público objetivo, estudio de mercado, plataforma, idiomas, equipo, plazos, presupuestos y modelo de negocios, pues en él se aplicará la información que se ha visto en el taller.
“A mí me gustaría que en sus proyectos pudieran realmente planificar su aplicación, vean las limitaciones tecnológicas, la real viabilidad económica y darles una visión real de qué es el mercado digital, el cual es muy competitivo”.
Lluis M. Abián, quien estudió artes y diseño gráfico, sugirió a los editores no trabajar para una obra en concreto sino en colecciones o un fondo editorial. “En lo personal yo he evolucionado porque pensaba erróneamente que el libro digital podía ser un campo desligado del papel”.
El también representante de la Federación Española de Asociaciones de Ilustradores se dijo encantado de poder compartir aquí su experiencia, en el sentido de poder ayudar e incentivar la creación en México y sobre todo el mercado latinoamericano.
“Compartimos con España cultura e idioma y a veces no estamos lo suficiente unidos a nivel cultural para crear proyectos en colaboración, y espero que de aquí puedan surgir colaboraciones”, puntualizó.