La Razón

Oaxaca - Los cuatro miembros de la Sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) capturados en Oaxaca por el secuestro de dos sobrinos del presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Gerardo Gutiérrez Candiani, eran los líderes de la banda de plagiarios, es decir, organizaban los raptos y repartían el botín que obtenían.

Damián Gallardo Martínez, integrante de la CNTE, era uno de los líderes de la banda de la cual han sido capturados 12 miembros. El otro jefe era David Vargas Araujo, ya también capturado.

De acuerdo con información de fuentes policiacas, ellos seleccionaban a las víctimas, armaban el plan para secuestrarlos y negociaban los montos de rescate. Indican que Sara Altamirano Ramos, quien además de ser parte de la Coordinadora es candidata del PRD a la alcaldía de Jalapa del Marqués, era una de las encargadas de repartir el dinero obtenido por los plagios.

Mario Olivera Osorio, también de la CNTE, está ubicado como otro de los cómplices que se encargaban de la repartición del dinero a otros integrantes de la banda. En el mismo caso está Lauro Atilano Grijalvo Villalobos, quien distribuía otra parte del botín.

Otros implicados se encargaban de vigilar a los plagiados y en el caso de los sobrinos del presidente del CCE, los tuvieron cuatro meses encerrados en una cisterna, amarrados y sin permitirles bañarse, y apenas les daban de comer.

Pese a esto, la Sección 22 de la CNTE asumió la defensa legal de los cuatro procesados por el secuestro de dos hijos del empresario Juan José Álvarez Candiani.

“Los conocemos, son luchadores sociales y de la causa. El gobierno los quiere callar, pero ellos cuentan con todo un movimiento que los va a respaldar, pues confiamos en ellos”, indicó el secretario de organización política de la sección 22, Francisco Villalobos.

Agregó que los cuatro son parte de la CNTE desde hace 20 años y que confían en su inocencia, por lo que el cuerpo jurídico del gremio, un abogado penalista externo y la Liga Internacional de Derechos Humanos, ya asumieron su defensa.