Oaxaca, México.- Ubicado a dos cuadras de la Catedral de la ciudad de Oaxaca, en la esquina de avenida Independencia y la calle Armenta y López se encuentra el majestuoso Teatro Macedonio Alcalá, edificio del siglo XX que será sede del Programa Científico durante el XII Congreso Mundial de la Organización de las Ciudades Patrimonio Mundial (OCPM) en noviembre próximo.
El edificio, cuya construcción se inició el 7 de agosto de 1904 y se inauguró el 5 de septiembre de 1909, durante la última parte del gobierno porfirista, albergará del 19 al 22 de noviembre a las y los alcaldes, expertos, académicos, líderes de opinión y estudiantes que participarán en el XII Congreso Mundial de la OCPM denominado Ciudades Patrimonio, Ciudades Sustentables.
Durante los 4 días que durará el Congreso, este espacio será el foro en el que las y los expertos en urbanismo, sociedad, cultura y medio ambiente examinarán en Oaxaca propuestas para la preservación del Patrimonio a nivel mundial.
Rubén Vasconcelos Beltrán, cronista de la ciudad de Oaxaca declaró que el Teatro Macedonio Alcalá es el escenario ideal para ser sede de las actividades del XII Congreso Mundial de la OCPM, debido a que tiene incrustado gran carga histórica.
“En los más de 100 años que lleva funcionando este teatro se han presentado espectáculos importantes de ópera, opereta, zarzuela, conjuntos corales y musicales importantes como la entonces Sinfónica del Instituto de Ciencias y Artes del Estado dirigida por el eminente director José Ives Limantour, la Orquesta Filarmónica de la Escuela de Bellas Artes de la Universidad de Oaxaca, la Orquesta Sinfónica Nacional, la Filarmónica de Querétaro, la Orquesta Sinfónica de Londres, la Orquesta Primavera de Oaxaca, la Banda de Música del Estado y la Orquesta de Cámara de la UABJO”.
Agregó que este espacio también ha sido escenario para la realización de actos políticos, asambleas y coloquios, y durante generaciones ha enmarcado el inicio y clausura de ciclos escolares.
“Se dice que en este teatro se cantó por primera vez la Tortolita Cantadora, El Nito, Cascabeles, Mañanitas Oaxaqueñas y que se tuvo el mérito de escuchar al genio de la música Don Silvestre Revueltas así como al fogoso y valiente orador Jesús Urueta, conocido como El príncipe de la palabra”.
Este espacio inicialmente se llamó Luis Mier y Terán en honor al militar y político oaxaqueño quien combatió durante la segunda intervención francesa a México; en 1916 fue nombrado Jesús Carranza y a partir de 1932 se denominó Macedonio Alcalá en reconocimiento al talento del músico y compositor oaxaqueño autor del Dios nunca muere.
El teatro cuenta con un amplio vestíbulo tipo Luis XV, con escaleras y pasamanos de mármol blanco, en el cielo raso tiene una exquisita alegoría a la música y a la poesía en la que destaca La Fama y El Premio.
El salón es de estilo francés del segundo imperio en forma de herradura y cuenta con localidades que se distribuyen en: luneta, plateas, palcos y el escenario. En la parte central de este espacio se ve la armonía que precede al concierto de las artes, representadas por personajes históricos que han descollado en cada una de ellas: Fidias, Dante, Virgilio, Beethoven, Miguel Ángel y Rafael. En los medallones vemos los retratos de músicos y escritores famosos como Víctor Hugo, Moliére, Richard Wagner, Calderón de la Barca, Giuseppe Verdi, Juan Ruiz de Alarcón, Racini, Shakespeare y en la parte central del arco del proscenio destaca el busto del general Luis Mier y Terán.
El telón de boca muestra una pintura del Partenón y el Monte Parnaso; entre las nubes se ve el carro de Apolo tirado por fogosos caballos y guiado por La Gloria; rodeando el carro se ven las nueve musas, cada una con el atributo que le corresponde.
“Se dice que 3 días después de la inauguración de este majestuoso espacio se presentó la ópera Aída de Giuseppi Verdi”, declaró el cronista de la Ciudad de Oaxaca.
El Teatro Macedonio Alcalá es descrito como una joya arquitectónica incrustada en el Centro Histórico de la ciudad de Oaxaca, Capital Cultural del Mundo 2013; es un monumento a las bellas artes y un recinto en el que prolifera la simetría en busca de la perfección.