Reconocen con el Ariel a creadores y artistas del séptimo arte en México

Oaxaca, México.- El reconocimiento a la trayectoria del actor Ignacio López Tarso, la entrega del Ariel de Oro a Arturo Ripstein y a Ernesto Gómez Cruz, así como el homenaje a María Félix y el tributo a José Revueltas, marcaron la 56 entrega de los Arieles, otorgados por la Academia Mexicana de Ciencias Cinematográficas (AMACC) la noche de este martes 27 de mayo en el Palacio de Bellas Artes.

En la edición número 56 de esta ceremonia en la que se reconoce y estimula la excelencia del cine mexicano, la presidenta de  la AMACC, la actriz Blanca Guerra, informó que en el 2013 se produjeron 126 películas mexicanas, la cifra más alta desde 1959. Asimismo, celebró que cada vez más mujeres participan en las distintas disciplinas de los proyectos cinematográficos.

En nombre de la Academia, Blanca Guerra agradeció el sistema de fomento para la producción cinematográfica que instrumentó el Estado, con el cual se canalizan importantes recursos de las instituciones culturales y de mecanismos como el Estímulo Fiscal a Proyectos de Inversión en la Producción y Distribución Cinematográfica Nacional (EFICINE), aunque precisó que todavía requieren ser perfeccionados para garantizar su eficacia y equitativo funcionamiento.

Dijo también que con el apoyo del Estado Mexicano, la Academia ha podido realizar acciones de difusión, investigación, preservación, desarrollo y defensa de nuestra cinematografía. Sin embargo, señaló que los circuitos de distribución y exhibición no le son favorables al cine mexicano.

“En 2013, 248 millones de personas pagaron su boleto en las salas cinematográficas, de éstas 30.1 millones fueron a ver cine mexicano, el 12 por ciento del total. Un incremento notable con respecto al 2012, que fue de 4 por ciento. No obstante, Hollywood sigue acaparando la atención del público: el 79 por ciento fue a ver sus películas, además dos películas mexicanas concentraron más de dos terceras partes de los espectadores totales del cine mexicano”. Precisó Blanca Guerra.

Al respecto, el presidente del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, Rafael Tovar y de Teresa, ofreció el apoyo del Gobierno Mexicano para ir “mano con mano” a resolver el problema de la distribución y exhibición del cine mexicano.

Al entregar el reconocimiento a la trayectoria del actor Ignacio López Tarso, el presidente del Conaculta dijo que se cuenta con todo el empeño para hacer que los caminos recorridos por la figura emblemática de López Tarso, pueda llegar a todos los públicos.

“Creo que no hay alguien que pueda simbolizar mejor la nobleza de la tarea cinematográfica, de la tarea escénica, como la figura de Ignacio López Tarso, quien ya ha sido reconocido con el Ariel de Oro y con La Medalla Bellas Artes”, puntualizó.

Ignacio López Tarso, actor de películas memorables como Nazarín (1958), Macario (1960), La vida inútil de Pito Pérez (1970) y El hombre de papel (1963), entre muchas otras, indicó que para él era un estímulo maravilloso recibir el reconocimiento de manos del presidente del Conaculta, y que le fuera entregado en el lugar donde nació como actor hace 65 años: el Palacio de Bellas Artes.

La gran ganadora de la noche fue la película La jaula de oro, de Diego Quemada-Diez, que se llevó el Ariel en las categorías de Mejor Película, Mejor Actor, Mejor Ópera Prima, Mejor Guión Original, Mejor Fotografía, Mejor Música Original, Mejor Sonido, Mejor Edición y Mejor Coactuación Masculina.

Los demás ganadores fueron: Mejor Dirección, Amat Escalante, por Heli; Mejor Actriz, Adriana Roel, por No quiero dormir sola; Mejor Coactuación Femenina, Lisa Owen, de Los insólitos peces gato; Mejor Guión Adaptado, María Renée Prudencio y Francisco Franco, por Tercera llamada; Mejor Diseño de Arte, Lorenza Manrique, de Ciudadano Buelna; Mejor Diseño de Vestuario, Mayra Gabriela Juárez, de Ciudadano Buelna.

Mejor Maquillaje, Adam Zoller, de Halley; Mejo r Efectos Visuales, Charly Iturriaga, de Cinco de mayo: la batalla; Mejor Efectos Especiales, Alejandro Vázquez, de Cinco de mayo: la batalla; Mejor Largometraje Documental, Quebranto, de Roberto Fiesco; Mejor Cortometraje de Ficción, Música para después de dormir, de Nicolás Rojas; Mejor Cortometraje Documental, Un salto de vida, de Eugenio Polgovsky; Mejor Cortometraje Animación, Lluvia en los ojos, de Rita Basulto; y Mejor Película Iberoamericana, Gloria, de Sebastián Leilo (Chile-España).