Leticia Robles de la Rosa
Oaxaca, México.-La Mesa Directiva y la Junta de Coordinación Política del Senado acordaron ponerle fin a los gorrones, como una forma de ahorro, pues giraron instrucciones a la Secretaría Administrativa para que nadie que no sea senador coma en los espacios destinados para la alimentación de los legisladores en el interior del salón de plenos.
Además, cancelaron el vino y los bocadillos en los eventos que realicen los legisladores; de igual manera, quedó prohibido alquilar salones de fiestas u hoteles para hacer eventos legislativos y contratar empresas privadas para organizar eventos.
Denominado Acuerdo de la Mesa Directiva y de la Junta de Coordinación Política por el que se Emiten las Reglas del Programa de Austeridad del Gasto y Racionalización de los Recursos en el Senado de la República, el documento instruye a la Secretaría General de Servicios Administrativos a realizar una serie de acciones.
Primero la obliga a establecer “mecanismos de control y seguimiento especial al ejercicio del presupuesto por capítulo, por partida y por área generadora del gasto, de manera que de forma quincenal presente reportes ejecutivos del comportamiento de la Mesa Directiva”.
Le instruye también a establecer “medidas de control al consumo de alimentos en el Salón de Sesiones y áreas adyacentes, a efecto de garantizar que estén al servicio exclusivo de los legisladores”.
Deberá “llevar a cabo un diagnóstico detallado de los gastos de operación de las secretarías generales y áreas técnicas, para implementar medidas que garanticen el óptimo uso de los recursos”.
Dispone que “para los foros, exposiciones, simposios, talleres y demás eventos que se solicitan por parte de los senadores y las comisiones, se utilizarán únicamente los espacios e inmuebles con que cuenta la Cámara; se atenderán con los recursos humanos y materiales de que dispone el Senado; se suspende el servicio de vino de honor y bocadillos, y solamente se otorgarán obsequios a los jefes delegacionales que participen en eventos”.
Y es que a pesar de contar con el personal preparado para realizar los eventos, desde 2012 el Senado ha aumentado su preferencia a contratar empresas privadas; por ejemplo, la semana pasada, durante los diálogos públicos en torno a la política social, organizados por la Mesa Directiva del Senado, se contrató a una empresa privada para contar con cuatro camarógrafos, a fin de realizar la transmisión en vivo por el Canal del Congreso, pese a que el propio Canal tiene sus camarógrafos.
Un evento que se organizó con empresas privadas fue el IV Foro de Consulta de los Presidentes Parlamentarios del G20, cuando Ernesto Cordero era el presidente del Senado, que costó 4.1 millones de pesos.
El año pasado, la Comisión de Relaciones Exteriores Asia-Pacífico gastó más de cinco millones en organizar, con empresas privadas, el Foro Asia Pacífico.
Se trató de un evento realizado en Puerto Vallarta, a principio de 2013, organizado por la Comisión Asia Pacífico que preside el priista Teófilo Torres Corzo. El Senado pagó a la empresa Grupo Espectáculo y Moda Facetas SA de CV la cantidad de tres millones 40 mil 500 pesos más IVA; al servicio de audio un millón 434 mil 700 pesos, y para los enlaces de Internet otros 547 mil pesos, así como 344 mil 800 pesos más IVA por la compra de chalinas.