Oaxaca, México.- Como un autor que escribió con rabia contra la injusticia de las dictaduras, un poeta que desentrañó con su voz el sentir de toda una generación, un puente con las vanguardias literarias, pero sobre todo, un hombre generoso que dedicó su vida a explorar el mar de posibilidades del sentimiento y la palabra, fue definido Juan Gelman (Buenos Aires, Argentina, 3 de mayo, 1939- Ciudad de México, 14 de enero, 2014) por miembros de la comunidad cultural que acudieron este miércoles 15 de enero a darle el último adiós.

María Cristina García Cepeda, directora general del Instituto Nacional de Bellas Artes, resaltó la riqueza de la obra de Juan Gelman colmada de fuerza y en la que a menudo transformaba su sufrimiento y pesar en palabras amorosas y llenas de poesía.

“El INBA ya platicó con la familia y con sus amigos para realizar un homenaje en los términos que ellos consideren más convenientes. Juan Gelman fue un hombre muy congruente con su tiempo y con sus ideas. Se pierde un gran autor que con su obra enalteció la literatura latinoamericana”, dijo la directora del INBA.

En la agencia funeraria de la colonia Juárez donde una multitud se congregó a las afueras del recinto, la viuda del escritor, Mara La Madrid, recibió las condolencias de amigos cercanos que fueron testigos de la vida que construyó el poeta con su familia en nuestro país a lo largo de varias décadas.

Marco Antonio Campos recordó a Juan Gelman como un hombre generoso que, contrario a otros poetas y escritores, tendía la mano a sus colegas y abundaba en sus obras siempre de forma objetiva y certera.

“Tuve el honor de que Juan corrigiera algunos textos míos y que me brindará su amistad. Su obra es muy vasta y llena de riqueza. Últimamente escribía sobre su padre, sobre su infancia, acerca de su paso por el Partido Comunista en textos impregnados con mucho humor. Su obra debe ser conocida por las nuevas generaciones”.

La escritora Myriam Moscona afirmó que Juan Gelman se convirtió para toda una generación en la voz de las personas que sufrieron la dictadura y que a través de sus poemas encontraron un medio para que la memoria nunca se perdiera.

“Lo recuerdo sobre todo en un viaje que hicimos juntos a Suecia, su manera de captar cuestiones esenciales de la vida, de todo lo que la rodeaba. Trabajó hasta sus últimos días con ahínco en su último poemario, era una tarea dura por su estado de salud, pero que al mismo tiempo le alimentaba el alma”.

El escritor y editor José María Espinasa recordó que Juan Gelman comenzó en sus primeros años a escribir con una gran rabia interior debido a la dictadura que vivió en Argentina y contra la que luchó siempre.

“Hay obras magistrales como Cólera Buey donde vemos y captamos a ese Gelman enojado ante las injusticias del mundo. El sufrió los embates de la dictadura a fondo, luchó durante muchos años por recuperar a su nieto perdido. Sin embargo, a pesar de tanta cólera, estoy seguro que Juan Gelman encontró la paz interior en los últimos años de su vida”.

El poeta Eduardo Langagne, director de la Fundación para las Letras Mexicanas dijo que Juan Gelman deja una obra monumental que fue un ejemplo para las nuevas generaciones de autores en América Latina.

“Quienes comenzábamos en las letras lo leíamos en México desde mediados de los años setenta y quedamos fascinados con su literatura. Él nos enseñó a través de su obra cómo volver a echar una mirada a la tradición, pero al mismo tiempo a leer a la vanguardia de escritores y poetas latinoamericanos que se abrían paso en el mundo literario de nuestro continente”.

Paola Estefanie La Madrid, hija de Mara La Madrid, definió al poeta como un segundo padre al que quiso y admiró durante 25 años.

“Fue un hombre entrañable con una obra vastísima e importante. Nunca, hasta sus últimos días dejo de trabajar, de hecho sus últimos poemas no los conocemos y por ello hay aún mucha obra y legado de él por descubrir. Entre sus últimos proyectos estaba el que realizaría en conjunto con el pintor Arturo Rivera en el que se iban a seleccionar 12 poemas para ilustrarlos”.

Rolando Díez, amigo cercano de Juan Gelman, afirmó que en sus últimos días el poeta mantuvo su entusiasmo aunque ya no salía a pasear por el barrio.

“Perdemos a un gran autor cuya obra se divide entre su amor a la poesía y su militancia por contribuir a un mundo más democrático y justo. Sin duda su ausencia deja un vacío permanente en las letras universales”.

Juan Gelman será velado durante este miércoles y mañana jueves será cremado por la tarde. Aún se desconoce dónde descansarán sus restos.