Ciudadania Express
Jueves 31 de julio, 2014. 03:54 pm

La animación debe ser considerada como arte: César Moheno Plá

| | 739 lecturas | 1 comentarios

Oaxaca, México.- César Moheno Plá tiene un estudio de animación denominado Llamarada. “Hacemos animación sobre todo 2D, Motion Graphic, 3D, mapping; nos dedicamos a hacer contenido original, cortometrajes, visuales, promocionales enfocados a la visión del estudio. Aparte de mi trabajo en Llamarada, me he dedicado a tratar de fomentar la producción de animación, entre artistas nuevos de animación  de la Ciudad de México”, refirió.

cesarmorheno El productor de animación fue entrevistado en el contexto del arranque del Primer Congreso Internacional de Educación Artística Vivarte. César Moheno Plá estudió comunicación en la Universidad Iberoamericana y es uno de los pocos productores de animación que hay en México. César llegó a trabajar en animación digital “de rebote”. Su chica estaba haciendo la tesis, que era una animación, y él decidió ayudarle en la producción “porque prácticamente lo estaba haciendo sola, relató.

Llamarada se fundó en 2008. Iniciaron el trabajo, literalmente, en el comedor de la casa de uno de sus integrantes. Hoy, relata, “el equipo base es de ocho personas y llegamos a emplear entre 12 y 20 personas más, dependiendo del proyecto”.

César Moheno Plá ofrecerá una clínica de animación durante el Primer Congreso Internacional de Educación Artística Vivarte 2014, que se llevará a cabo del 31 de julio al 2 de agosto, en el Centro Nacional de las Artes. A continuación una entrevista con el productor de Llamarada y apasionado promotor de la animación digital mexicana.

-¿Por qué decidiste hacer o producir animación digital?

-Bueno, digamos que a la animación llegué un poco de rebote. Mi chica estaba haciendo su tesis, que era un proyecto de animación y, yo justo, la estaba ayudando a producirlo porque prácticamente lo estaba haciendo sola. Cuando acabó su carrera, empezó a buscar chamba para hacer animación y conocimos a quienes ahora son el resto del equipo, que trabajan en diferentes casas productoras. Un poco nos fuimos conectando con base en esos intereses en común que tienen que ver con la animación. Y ya finalmente armamos el estudio de Llamarada.

-¿Qué hace un productor de animación?

-Mi labor como productor es más trabajar en equipo con los directores, y la animación siempre es un trabajo en equipo. Incluso, cuando el director va a presentar su visión, cuando la tiene que presentar a diferentes personas o equipos, siempre es pensando en equipo.

Trabajo con el director para ayudarlo a que tenga todas las herramientas que necesita para crear su visión, y el director trabaja con otro equipo de personas que también juntos armamos; digamos, hay alguien que le está haciendo la dirección de arte, le propone gráficos, le propone cómo se van a ver los personajes, hay una persona que es el director de animación, que le propone cómo se van a mover los personajes, qué ritmo van a tener; es una labor muy grande y de mucho equipo, de mucha gente aportando todas esas inspiraciones y todas esas creatividades que vienen de diferentes lados, para crear proyectos que, justo por eso, son muy ricos en cuestión de bagaje.

-¿Qué es lo que más te apasiona de la animación?

-Desde siempre me interesó la cuestión gráfica, desde muy niño visité museos, tomé clases de arte desde chico, en algún momento iba a la escuela de artes plásticas; entonces, la gráfica siempre ha sido una constante en mi vida. Llegar a trabajar con gente talentosa, que puede plasmar lo que piensa de maneras gráficas diferentes, creativas, importantes para lo que es la animación actualmente en México, eso me gusta.

Me gusta ser la persona que les puede dar las herramientas para que hagan sus proyectos, y un poco me he especializado en eso, en cómo conseguir que los directores o los equipos puedan plasmar su visión y tener salida de sus proyectos. Porque ahorita los proyectos de animación tienen pocas ventanas.

-¿Cuál ha sido la historia de Llamarada a seis años de su nacimiento?

-Empezamos trabajando todos juntos en el comedor de la casa de uno de nosotros, y ya ahora tenemos un estudio con muchas computadoras, equipado, le damos trabajo a mucha gente. Ya tenemos varios proyectos al año. Nos va muy bien, tratamos de mantenernos delimitados en proyectos que podamos controlar nosotros, que nos podamos integrar mucho creativamente.

-¿Cómo se financian?

-Trabajamos mucho con becas o fondos de producción para animación. Además, también, un poco del trabajo que hacemos es para museos y exposiciones que necesitan mucho material audiovisual para explicar cosas que son muy difíciles de explicar en fichas técnicas o panfletos, por ejemplo. Entonces, los museos generalmente ponen pantallas en las que se proyectan animaciones, porque la animación tiene mucha capacidad de síntesis y la gráfica ayuda mucho para explicar cosas complejas. Lo que nosotros hacemos es ayudar a la museografía y a los curadores del proyecto a hacer videos didácticos para las exposiciones.

-¿Qué becas han ganado o qué premios les han otorgado?

 -Para hacer nuestros videos muchos son autofinanciados aquí en el estudio. Se hacen en tiempos libres, se organizan para que, entre proyectos, podamos avanzar en proyectos personales, pero también tratamos de aplicar a becas de fomento a la producción; una de ellas es la de cortometrajes del Imcine, que otorgan cada año, en tres ocasiones la ganamos. Nuestros otros trabajos, que han sido como cinco cortometrajes, además de los de Imcine, que hemos hecho aquí, también hacemos la labor de presentarlos en festivales, meterlos a concurso. En general, a todos nuestros trabajos les ha ido muy bien.

-¿Cómo se organizan en el estudio?

Con nosotros salió una generación de gente que estaba trabajando en casas productoras, que estaba trabajando en comerciales, y justo, tenían una vocación más de arte y de dirección, más de crear animación de autor. Esa generación ya está tomando otros rumbos, por ejemplo, ColectivoDiezymediaViumasters, un par de gente más y Llamarada, creamos un poco estos estudios utópicos que son entre estudios que funcionan como productoras, pero también estudios que funcionan como colectivos de arte y animación.

En Llamarada la idea era como tener las menos jerarquías posibles. Al principio fue muy difícil, porque justo todo el mundo tenía que tomar decisiones de todo; para cada decisión había que hacer una junta, entonces había algunas personas que estaban de acuerdo, otras que no. Luego nos dimos cuenta que igual las jerarquías o las tareas independientes sí funcionan, digamos que, esa utopía, en la que todos íbamos a tener las mismas responsabilidades  y el mismo poder de decisión, se ha ido transformando.

Ahora, generalmente lo que hacemos es que tenemos muchos directores, son cinco directores que cada uno tiene su área de especialidad y su camino recorrido, lo que hace que el estudio sea muy dinámico en cuestión de las propuestas. Yo soy el productor ejecutivo. Generalmente, cada proyecto pasa por mí para organizarnos con el director, con sus necesidades, y cada proyecto lo maneja su propio director. Lo que hacemos, también, es tratar de trabajar en proyectos que nos gustan, que nos apasionan, y contratar a gente talentosa para que ellos también tengan la oportunidad de trabajar en proyectos que les apasionen, y que seamos una comunidad preparada y lista para hacer cosas chidas.

-Entonces, un requisito indispensable es que verdaderamente te apasione la animación para hacer mejores cosas y con más talento, ¿a eso te refieres?

-La animación es súper lenta, es súper pesada, es súper difícil, entonces, si ya estás dando todo tu tiempo, toda tu vida y todo tu cansancio a un proyecto, lo ideal es que te guste. Hay veces que no pasa, pues, porque también hay que pagar renta y justo también hay que estar pendiente del crew. Nosotros estamos en un punto en el que ya hemos tomado un camino que casi siempre disfrutamos.

-Para ti, ¿qué es el arte?

-Yo siento que el arte es tan importante como la infraestructura pública, tan importante como tener banquetas y servicio de transporte público que sea agradable; así debe ser el arte. Siento que el arte es algo a lo que deberíamos tener acceso todos, en igual medida. Yo pienso que nuestra sociedad y la cultura tiene que estar balanceada, entonces, sí estoy de acuerdo con que tenemos que tener educación y recibir educación física o de deportes, y también, por eso mismo, me parece importante que haya un desarrollo y acceso, de todo el mundo, a la cultura. La educación y el arte es una parte de todos los seres humanos que se tiene que desarrollar y hasta, digamos, exorcizar, y estar ahí trabajándola.

-¿Crees que el arte hace a las personas ser mejores?

-No es que todos tengamos que ser artistas para ser más completos, pero sí que el arte expuesto a todas las personas no nos puede hacer malos individuos.

-¿Cuál es la función social del arte?

-Creo, más bien, que hay diferentes niveles y tipos de educación, por ejemplo, la educación muy temprana, luego toda la educación básica, en primaria y secundaria,  y luego está la educación que tú eliges. Tú escoges tus caminos y puedes ser más o menos autodidacta. Lo que sí creo es que si estamos hablando de la educación obligatoria, la que a todo el mundo le toca, estar expuesto al arte, por un lado, creo que todo el mundo tiene esa parte humana en la que expresarse artísticamente, sea algo de valor o no, te ayuda como persona, como ser humano, para expresarte creativamente y ser mejor persona, o sea, una persona más completa, y a eso deberíamos tener acceso todo el mundo; ya sea tomar clases de baile o clases de pintura, o esculturas con macarrones, es como una función del cuerpo y de la mente, creo.

Por otro lado, también dar acceso a la mayor cantidad de personas posible a una educación de arte y creatividad puede potenciar a muchos artistas que México tenga en su territorio, porque finalmente las culturas no sólo son económicas, sino también lo que le da poder a las culturas es cómo exponen al mundo su arte, es arquitectura, sus medios visuales, sus plazas y jardines; es decir, todo lo que conforma una cultura.

Es importante tener más personas preparadas por ese mundo, igual de ahí sacamos más semilleros de artistas. Hay que tratar de tener una educación balanceada, y así como los niños aprenden futbol desde chiquitos, todos los niños deberían tener acceso a clases de música, de artes plásticas y de baile, porque finalmente mucha gente no sabe que tiene talento para algo hasta que se lo dicen o hasta que un maestro lo descubre. También somos personas más ricas, polifacéticas y seres humanos más completos, que es lo que hace a una sociedad más fuerte y cohesionada.

www.ciudadania-express.com