Este debate es un "
desafío descarado y una provocación grave contra el gran sistema socialista de la República Popular Democrática de Corea y su gente" y una "
declaración de guerra" a Pionyang, denunció el órgano norcoreano responsable de las negociaciones entre las dos Coreas a través de un comunicado, citado por la agencia
TASS.
La misión norcoreana ante la ONU señaló por su parte que esta discusión está destinada a "
destruir el sistema ideológico del país".
La cuestión sobre la situación de los derechos humanos en Corea del Norte fue incluida en la agenda del Consejo de la Seguridad el pasado lunes a petición de 10 de sus 15 miembros. Rusia y China
votaron en contra de la discusión del asunto.