Oaxaca,México.- Nacido en Yucatán en 1928, Raúl Renán ha publicado varios libros de poesía y también ha dedicado parte de su vida a formar nuevos poetas. Además fundó la editorial La Máquina Eléctrica y ha publicado en numerosas revistas y suplementos del país.
En su visita a Oaxaca, en el Centro Cultural de San Pablo, antes de su exposición sobre publicaciones alternativas en los años sesenta y setenta, Raúl Renán tuvo una pequeña conversación con el también poeta, narrador y periodista oaxaqueño Julio Ramírez. Hablaron sobre la poesía de Renán, de cómo el poeta yucateco pasó sus primeros años con mayas y cómo esto marcó significativamente su poesía.
El poeta contó que sus influencias poéticas “son realmente a partir de mi conocimiento del maya. Yo crecí entre mayas, mi madre fue maya, mi padre fue indoeuropeo, pero eso no cuenta. […] Esa forma de trabajo de la lengua maya la vertí en mi trabajo literario que descubrí tiempo después, primero narrando cuentos breves y segundo haciendo versos. Casi siempre eran versos breves.
Ahora tengo poemas largos, casi siempre tengo poemas largos, de largo aliento, editorialmente quiero reunirlos todos, que son muchos. Ahí me desboqué y me salí de madre auténticamente porque dejé la parte del maya que habla con brevedad y habla a veces apoyando al que habla. Hay una palabra que usan los mayas que es jaj, que quiere decir ‘verdad’. Por eso cuando están conversando dicen jaj, ‘es verdad lo que tú dices’. De esa manera apoyo la conversación contigo porque te digo ‘tú dices la verdad, yo nada más escucho, te entiendo’. Es muy hermoso”.
Julio Ramírez, lector y conocedor de la poesía de Renán, le comentó que utiliza la parte melodiosa de la lengua maya en su poesía. A lo que el poeta yucateco contestó que tiene una “cosa natural que es el ritmo. Mis alumnos me dicen eso, maestro, si usted no tiene la imaginación tiene el acento, y el acento hace sus poemas y sí es cierto. La naturaleza de lo que estamos hablamos tiene otra cadencia, otro ritmo, el del origen”.
El poeta de 86 años después de esta pequeña conversación hizo en su conferencia un pequeño recuento de las publicaciones marginales que se hicieron en México en las décadas de los sesenta y setenta. Ediciones que muchas veces no pasaban de pocos números, pero en las que participaron muchos de los ahora conocidos escritores. Con pocos recursos y muchas ganas esas revistas muestran parte del panorama cultural mexicano de esos años.