Oaxaca, México.- “No entiendo cómo alguien pueda vivir sin cultura, yo veo cultura por todas partes, la veo en las caricaturas, en los mariachis, en las vedettes, la veo todos los días; sin cultura, sin referencias de libros, sin referencia de palabras, sin intercambios, difícilmente aceptaríamos que la vida es vivible”, expresó la escritora Elena Poniatowska.
En una entrevista con Conaculta, la autora de Todo empezó el domingo (2012); Sansimonsi (2013) y El universo o nada. Biografía del estrellero Guillermo Haro, puntualizó que lo único que hace en su vida es escribir, pero no tiene una fórmula de creación. “Lo que escribo va llegando y lo rehago, al igual que Carlos Monsiváis y José Emilio Pacheco reescribo y reescribo, ellos reescribían incluso en las galeras, en las últimas páginas, uno quisiera estar reescribiendo toda la vida para que quede muy bien”.
Sobre su proceso creativo reveló, sin embargo, que siempre le ha fascinado oír a gente que no se parece a ella, pero sabe que le va a decir lo que podría decirse a sí misma. “Esa gente que no se me parece la encuentro en la calle, en las fondas, en las manifestaciones y como soy chaparrita eso me ha facilitado la amistad de las personas porque no me ven agresiva, basta con que les diga oiga: cómo le fue hoy, está usted casada, tiene novio, cuándo se enamoró, porque entonces se viene una avalancha de recuerdos, propuestas, confesión, un grito de desolación, tristeza y todo eso lo recojo”.
Premio Cervantes de Literatura 2013, Premio Nacional de Ciencias y Artes en 2002, autora de libros emblemáticos como La noche de Tlatelolco, o Hasta no verte Jesús mío, Elena Poniatowska recibirá hoy la Medalla Bellas Artes, como distinción a su trabajo y el impacto que ha tenido en la promoción y la difusión de las artes en México.
“Para mí es un enorme gusto recibir esta distinción, porque el Palacio de Bellas Artes es el lugar al que fui desde niña a ver muchos conciertos, obras teatrales, exposiciones y murales. Es un honor. Me da gusto pasar a formar parte de otros premiados como Luis Nishizawa, a quien admiro y quiero (…) Representa una ilusión enorme que un sitio al que yo iba con tanto gusto e ilusión, al que fui con mi mamá de niña, me dé un premio”.
Pero para Héléne Elizabeth Louise Amélie Paula Dolores Poniatowska Amor, quien nació en París, Francia en 1932, hablar de sí misma es algo que no considera necesario: “ya en otras ocasiones he expresado que no necesito hacer una autobiografía, porque en cada uno de mis libros está algo mío”.
Aclaró: “he escrito sobre mujeres, sobre Tina Modotti, sobre Leonora Carrington con quien me identifiqué muchísimo porque es una pintora inglesa y aunque era un poquito mayor que yo, sentí mucha afinidad con ella y mucho amor. No sentía nada de cariño por Tina Modotti, mi mamá la odiaba cordialmente, pero a medida que fui investigando con los viejos comunistas de México y España y cuando fui viendo su entrega en la creatividad y la fotografía, ya la quise.
“La que más quiero y más pienso es en la soldadera Jesusa Palancares, que es para mí un ejemplo de vida, pero no sólo me apasiono por las soldaderas, también me apasiono por las niñas bien, me puedo apasionar por todas, salvo por una diputada, eso sí no”, aseveró.
Soy una mujer afortunada, dijo, tengo mucho agradecimiento por todo lo que me ha sucedido en mi vida, mis tres hijos Mane, Felipe y Paula, a quienes les he dado más problemas que ellos a mí, y grandes amigos. Vivo un país que amo profundamente. Guillermo Haro decía que era un astrónomo con muy buena estrella, también yo soy una persona con buena estrella, con muchas oportunidades que ha recibido mucho cariño, críticas también, pero más cariño.
̶ ¿Y qué libro recomendaría a los jóvenes para que se acercarán a su obra?
̶ No quiero que me conozcan. Prefiero ser toda la vida un misterio que no se sepa, mi abuela le decía a mi mamá: sé misteriosa. Así que no, prefiero que no me conozcan, no puedo recomendar ningún libro mío, salvo en el que estoy trabajando.
Luego explicó: “es muy difícil que me ponga a hablar de mí misma, pues uno se echa muchas flores o mucha crema a sus tacos, y yo ni siquiera he sido materia de psicoanálisis”.
Prefirió hablar sobre la nueva generación de escritores que están reflejando a la actual sociedad mexicana: Me gusta el trabajo de José Joaquín Blanco, Jaime Avilés y Fabrizio Mejía Madrid. “Hay tantísimos que nos reflejan y que nos cuentan a nosotros mismos, hay gente que sí es muy capaz en nuestro país.
“Lo que se necesitan son muchos escritores como Jorge Ibargüengoitia. Fabrizio tiene un espectacular sentido del humor. Hay muchas personas jóvenes que están escribiendo, no creo que los escritores se estén acabando, claro los viejos nos estamos yendo, pero hay mucha gente llena de talento e inventiva”.
Dio a conocer que actualmente está trabajando en una novela sobre la segunda esposa de Diego Rivera (Guadalupe Marín), a quien entrevistó, así como una novela sobre los Poniatowska, tema del que no tiene mucho material. “No tengo material porque no hay nada en español, todo está en polaco y no sé nada en polaco, tengo que limitarme a lo que esté en francés, en inglés… pero bueno, lo voy a hacer, espero que como los gatos, tenga un poquito más de vida”.
El 19 de noviembre de 2013 se anunció que Elena Poniatowska sería distinguida con el Premio Cervantes de Literatura, galardón dotado con 125 mil euros, ese mismo día la escritora dio a conocer que utilizará el monto económico para crear una fundación.
Sobre ese tema explicó: “se va hacer esta fundación para dar libros, que sea un lugar en el que haya talleres, conferencias y lecturas. Me gustaría hubiera una habitación o dos para los niños que vienen de fuera, me emocionaría que se pudiera dejar como un legado de libros o documentos”.