Oaxaca, México.-La esposa del presidente Enrique Peña Nieto,
Angélica Rivera, aseguró a los mexicanos en mensaje videograbado y difundido a través de su página de internet, que no tiene nada que esconder luego de que se difundiera que posee una casa en las Lomas de Chapultepec.
De manera paralela hizo público el contrato de compraventa con reserva de dominio de la casa en Lomas de Chapultepec y anunció que para evitar que se ofenda y difame su integridad y la de su familia tomó la decisión de vender los derechos derivados de dicho contrato.
“Quiero comunicarles que he tomado la decisión de vender los derechos derivados del contrato de compra-venta, porque yo no quiero que esto siga siendo un pretexto para ofender y difamar a mi familia”, aseguró.
“Yo no tengo nada que esconder; como ciudadana, aún sin ser servidora pública, me siento con responsabilidad de explicarles paso a paso todo lo relacionado con la casa que ha sido cuestionada por algunos medios de comunicación”, dijo.
Angélica Rivera argumentó que desde los 15 años de edad inició su carrera artística y trabajó durante 25 años para la empresa Televisa realizando telenovelas que no sólo fueron vistas en México, sino en muchos otros países con una “alta audiencia”.
Al ampliar la información dada por el vocero del gobierno federal, Eduardo Sánchez, —mientras ella viajaba a China para acompañar a su esposo Enrique Peña—, sobre la casa ubicada en Sierra Gorda número 150, precisó que en 2008 en el marco de su contrato con Televisa se le otorgó el uso y goce de la casa ubicada en Paseo de las Palmas número 1325 donde comenzó a vivir en ese mismo año.
Angélica Rivera dijo que ganó 131 millones 690 mil pesos en 2010 y pagó impuestos por 39 millones 278 mil pesos.
Detalló que al finalizar el contrato en 2010 con la empresa televisiva se le pagó con la propiedad de Paseo de las Palmas junto con un monto total de 88 millones 631 mil pesos más IVA.
“Así les demuestro que tengo la capacidad económica y recursos propios que me han permitido construir un patrimonio propio para mí y para mis hijas”, afirmó.
Angélica Rivera narró que para continuar forjando un patrimonio para sus hijas en 2009 inició la búsqueda de un terreno para construir una casa.
Admitió que efectivamente conoció al ingeniero Juan Armando Hinojosa a quien le comentó que quería conseguir un terreno y adquirir una casa ante lo que acordaron que una de sus inmobiliarias adquiriera un terreno y construyera la casa a su gusto y con el arquitecto de su elección.
“Yo me comprometí a que una vez que se terminara la construcción de la casa celebraríamos un contrato de compraventa, la inmobiliaria consiguió y adquirió en noviembre de 2009 el terreno de Sierra Gorda número 150 que está junto a mi casa de Palmas, se inició la construcción de la casa en el mes de julio de 2010, tiempo después la inmobiliaria me comentó que el terreno de junto estaba en venta y se acordó que se compraría para integrarlo a la casa que estaba en construcción”, destacó
En este contexto expuso que una vez concluida la casa en enero de 2012 firmó con la inmobiliaria una compraventa con reserva de dominio respecto a los inmuebles fusionados con número 150 y 160 de la calle Sierra Gorda, así como en relación con las construcciones en ellas edificadas.
“En esa fecha se me dio formalmente la posesión, el total del precio de la compraventa fue de 54 millones de pesos a un plazo de 8 años con un interés del 9 por ciento. Al día de hoy he pagado un total de 14 millones 343 mil 555 pesos, monto que equivale casi a un 30 por ciento del total del precio pactado. La casa y las construcciones sigue siendo propiedad de la inmobiliaria hasta que yo haga el pago total del precio pactado y de todos sus intereses”, precisó en el mensaje que duró 7 minutos.
En tono molesto agregó que para evitar especulaciones declaraba que además es propietaria de un departamento en Miami desde 2005 y un departamento en La Herradura que adquirió para su mamá.
Al finalizar, dijo: “Hoy estoy aquí para defender mi integridad, la de mis hijos y la de mi esposo... Yo no puedo permitir que este tema ponga en duda mi honorabilidad, sobre todo se pretenda dañar a mi familia”.
jgl