El gobierno de Japón busca reanudar la caza de ballenas en el Antártico para 2015 a pesar de una sentencia del máximo tribunal de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que prohibió al país capturar a esta especie, indicó este miércoles un funcionario.
El gobierno japonés tuvo que renunciar a la temporada de caza 2014-2015 tras un veredicto de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) que consideró que este país usa la captura de ballenas con fines comerciales a pesar de que teóricamente la presentaban como una actividad de investigación científica.
El gobierno de Japón presentó esta semana un nuevo proyecto para seguir cazando a estas especies, en el que los balleneros recopilarán datos para “construir un modelo del ecosistema del Océano Antártico”, de acuerdo con un responsable de la agencia de pesca de este país citado por la agencia AFP.
“Con este plan sólo tendremos como objetivo los pequeños rorcuales del Antártico”, dijo, según la agencia. Los rorcuales son una familia de ballenas más numerosas que las ballenas comunes y las jorobadas, que ya habían sido cazadas en Japón anteriormente.
El gobierno japonés ha defendido la caza de ballenas con el argumento de que es para fines científicos, pero los ambientalistas acusan que el programa de investigación ballenera de Japón es un intento velado para evadir la prohibición del comercio de la carne de estos animales, muy apreciada en el país.
El fallo del CIJ aseguró que Japón no ha sido capaz de justificar los fines científicos de su programa de caza y acusó al país asiático de violar la Convención Internacional para la Reglamentación de la Caza de Ballena, firmada en 1946 para promover la conservación de estos mamíferos.
Australia demandó a Japón ante la CIJ en mayo de 2010, ya que sostenía que las capturas japonesas perseguían fines comerciales.
Desde 1987 Japón ha capturado un promedio de 400 ballenas cada año en el océano Antártico, según los datos de la Agencia japonesa de Pesca. En 2005 estableció un objetivo anual de 935 piezas y los balleneros capturaron un total de 853 ese año y 679 en 2008.
Los japoneses continúan por otra parte cazando cetáceos en el Pacífico Norte y en sus aguas territoriales, una zona que no entra en el marco de la sentencia de la CIJ.
Fuente CNNEXPANSIÓN