Oaxaca, México.- Los mexicanos gastamos, en promedio, más de 14 mil pesos para protegernos del delito y abastecernos de agua potable, medicamentos y alumbrado. La finalidad es suplir las deficiencias en bienes y servicios que deberíamos recibir gratuitamente porque los pagamos con nuestros impuestos, informó el Centro de Análisis Multidisciplinario (CAM) de la Facultad de Economía (FE) de la UNAM.
La mayoría de la población paga para recibir servicios públicos eficientes, seguros, de calidad y que cubran las necesidades de cualquier ciudadano. No obstante el alto costo, en la práctica no sólo son de mala calidad, sino que no son recibidos por gran parte de los ciudadanos, señaló el estudio
¿Gastos extras o servicios pagados?
Entre 2005 y enero de 2014, los recursos destinados a seguridad personal o del hogar se incrementaron más de 250 por ciento ante las carencias de los servicios de justicia, vigilancia y resguardo del patrimonio y el avance de la delincuencia. En 2013, los mexicanos desembolsaron seis mil 426 pesos en este rubro.
Además, los problemas en el sector salud obligan a las familias a atenderse con particulares y pagar personal médico calificado, enfermería y medicamentos, entre otros.
En este rubro, el gasto extra en los hogares aumentó 258.5 por ciento: en 2005, el monto fue de dos mil 747 pesos; en enero de este año, siete mil 102 pesos, refirió el trabajo realizado con datos de las encuestas nacionales de Ingresos y Gastos de los Hogares de 2006, 2008, 2010 y 2012; de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública de 2011 y 2013 y de Salud y Nutrición de 2006 y 2012.
El alumbrado público, insuficiente en varias colonias, no cubre las necesidades de la población, que se ve obligada a invertir en este beneficio. En enero pasado, las familias gastaron en promedio 640 pesos extras en este rubro, lo que representó un aumento de 182.6 por ciento en comparación con 2005. Ahora las casas proveen el servicio al tratar de iluminar un perímetro amplio, detalló el CAM.
Además, los ciudadanos pagan por un servicio de agua potable al comprar garrafones y botellas o adquirir mecanismos de purificación. En este rubro, en enero pasado hubo un incremento del 132.8 por ciento en comparación con 2005.
Además de estos gastos extras, se suma el desembolso cotidiano en transporte, servicios de recolección de basura, limpieza de las calles y espacios públicos, uso de parques y jardines, guarderías, bibliotecas, zoológicos y lugares de recreación.