Cimacnoticias | México, DF.- 20/02/2015
Organizaciones civiles aseguraron que la trayectoria política de Eduardo Medina Mora lo imposibilita para ser ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), ya que estaría involucrado en graves violaciones a Derechos Humanos (DH), como la tortura sexual de 11 mujeres.
Después del deceso del ministro Sergio Valls Hernández en diciembre pasado, este martes 17 de febrero el Ejecutivo federal envió al Senado la terna conformada por Medina Mora, Felipe Alfredo Fuentes Barrera y Horacio Armando Hernández Orozco, para que de ahí determine quién ocupará el cargo vacante.
Al respecto, un grupo de organizaciones defensoras de los DH expresaron en un comunicado su preocupación porque Enrique Peña Nieto propusiera a Eduardo Medina Mora en la terna, pues consideran que no sería un ministro independiente del Poder Ejecutivo.
Al mismo tiempo, las organizaciones reclamaron que no se propusiera a ninguna mujer pese a que actualmente en la Suprema Corte hay una mayoría de ocho hombres y dos mujeres.
Sin embargo, la crítica se enfocó en Eduardo Medina Mora, quien fue secretario de Seguridad Pública (SSP) en el sexenio de Vicente Fox, y quien es señalado como uno de los responsables de los operativos policiacos del 3 y 4 de mayo de 2006 en Texcoco y San Salvador Atenco, Estado de México.
En estos operativos policiacos, donde participaron más de 2 mil 500 efectivos de la policía estatal y la entonces Policía Federal Preventiva (PFP), hubo un saldo de dos jóvenes asesinados, 207 personas detenidas, entre ellas 47 mujeres, de las cuales 26 denunciaron haber sido torturadas y violadas sexualmente por elementos policiacos
De las 47 mujeres sobrevivientes de tortura sexual, 11 continúan su litigio ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), ya que las instancias nacionales no les garantizaron justicia.
Al respecto, las agrupaciones, entre ellas el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, que representa a las mujeres de Atenco ante la CIDH, recordaron que en diciembre de 2006 Medina Mora asumió como titular de la Procuraduría General de la República (PGR), y en su gestión declinó su competencia para investigar los hechos de Atenco a pesar de la participación de policías federales.
Además de la tortura sexual en Atenco, la gestión de Medina Mora al frente de la PFP se destacó por otras violaciones a DH cometidas por elementos de la SSP a su mando, tales como las ocurridas en Oaxaca en noviembre de 2006 en el marco de los operativos contra la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca.
Las organizaciones, entre ellas la Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos Todos los Derechos para Todas y Todos, también mencionaron que Medina Mora se ha destacado por ir en contra de los derechos de las mujeres.
Como procurador general de la República utilizó sus atribuciones para intentar obstaculizar el ejercicio de los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres al presentar una acción de inconstitucionalidad en contra de las reformas que despenalizaron el aborto en el Distrito Federal en 2007.
Contrario a los avances que en materia de DH y específicamente en materia de género y derecho a decidir se han dado a nivel internacional, Medina Mora pretendió revertir una reforma que reconocía derechos históricamente negados a las mujeres.
Los centros de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas, de la Montaña Tlachinollan, Fray Francisco de Vitoria, y de las Mujeres de Chihuahua, entre otros, aseguraron que durante su cargo como procurador tuvo diversas recomendaciones por parte de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
En el historial de Medina Mora también cuenta el cargo que ocupó durante el sexenio de Carlos Salinas de Gortari, cuando fungió como asesor del equipo negociador del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) en los temas de Agricultura, Normas, Prácticas Desleales de Comercio, Inversión y Reglas de Origen.
Es decir, participó en la elaboración del acuerdo que ha sido sistemáticamente denunciado por organizaciones campesinas por generar condiciones de pobreza e inequidad en el campo mexicano.
En la actualidad se encuentran en litigio ante los tribunales federales múltiples casos que confrontan la visión privatizadora del campo respaldada por el TLCAN, con el derecho a construir un proyecto de desarrollo que sea sustentable y respetuoso de la cultura y los pueblos originarios.
Este cargo puede influir en su eventual desempeño como ministro, porque de acuerdo con las agrupaciones, en manos de la SCJN estará la definición sobre temas como el futuro del campo y la pertinencia o no de sembrar transgénicos o las violaciones a DH cometidas por la actividad minera.
“Resulta difícil que un personaje que ha impulsado la privatización del campo en beneficio de grandes empresas, pueda mantener un criterio de imparcialidad y objetividad como ministro en este tipo de asuntos”, criticaron.
Pero la historia no termina ahí, su carrera privada ha estado ligada al sector empresarial y corporativo, de manera especial resalta que fue director adjunto y director corporativo de Planeación Estratégica de Grupo Desc S.A. de C.V. (hoy grupo Kuo), empresa que tiene como una de sus líneas principales la industria farmacéutica, petroquímica y química.
En este cargo las organizaciones también ven contradicción de intereses, pues dicen que en el contexto de la puesta en marcha de la reforma energética, resulta preocupante que sea postulado como ministro una persona que en algún momento tuvo intereses en el ramo de la industria petroquímica, siendo que al máximo tribunal podría resolver casos al respecto.
Finalmente, las agrupaciones destacan que no cumple los requisitos mínimos porque el artículo 95 de la Constitución mexicana establece que uno de los requerimientos para ser ministro es haber vivido los últimos dos años en el país, y Medina Mora reside en el extranjero desde noviembre de 2009.
Cabe decir que desde entonces fue nombrado embajador de México en el Reino Unido y posteriormente en los Estados Unidos.
“La postulación de Medina Mora a la terna de candidatos a ocupar la plaza de ministro de la SCJN evidencia un profundo desprecio a los Derechos Humanos por parte de la Presidencia de la República”, dicen las agrupaciones en un comunicado.
Critican que parece que se quiere impulsar un perfil policiaco y protector de los intereses corporativos al interior del máximo tribunal mexicano, por lo cual pidieron a los senadores un análisis exhaustivo de los perfiles y apegado a los más altos estándares de DH.