Oaxaca, México.-La represión cometida contra los maestros en 2006, en el estado de Oaxaca, es un hecho que dejó huella en México y que a la fecha no ha tenido consecuencias para los responsables que cometieron, en muchos casos, violaciones graves a los derechos humanos. El próximo domingo se cumplirán 9 años de aquel 14 junio de 2006, cuando elementos de la policía llegaron al centro de la ciudad de Oaxaca para intentar diluir el movimiento de los maestros, agrediendo no sólo a los docentes sino a otras personas que se encontraban en el lugar. Al respecto, este domingo la Comisión de la Verdad de Oaxaca, presidida por el sacerdote Alejandro Solalinde, y encargada de esclarecer los hechos de represión cometidos de 2006 a 2007 en esta entidad del sur del país, anunció que realizará una sesión pública este domingo en el teatro Macedonio Alcalá, en donde víctimas de la violencia de aquellos años rendirán su testimonio abiertamente. En este particular, Alejandro Solalinde enfatizó que la tarea de la Comisión que preside es brindar los elementos necesarios a las instituciones correspondientes para llegar a la justicia en el caso. Añadió que una de las principales preocupaciones es poder aportar elementos que permitan la reparación del daño a las víctimas, así como las garantías de no repetición de esta clase de hechos que derivaron en violaciones a los derechos humanos. “Esto lo hemos venido trabajando desde el año pasado y hemos tenido contacto con las víctimas, con muchos actores de esos acontecimientos, y hemos pensado que tener una sesión pública, privilegiando la presencia de las victimas, puede ser un detonante para que más personas que conocen los hechos se sigan acercando a la Comisión de la Verdad”, dijo. El sacerdote manifestó que en este tiempo de trabajo de la Comisión se han recibido un gran número de testimonios de las víctimas de represión, muchos de ellos, dijo, inéditos, pues no se habían atrevido a dar a conocer su vivencia por miedo a sufrir ataques. “Esta sesión pública puede ser un detonante para que rompan varias barreras, en primer lugar, la barrera de la desesperanza, muchas personas ya no esperan gran cosa, hay mucha desconfianza, la impunidad ha sido enorme en este caso y alguno de ellos piensan que no se puede hacer mucho, sin embargo otros sí se acercan y empiezan a hablar y a construir con nosotros ese informe que será clave”, apuntó. Reiteró que en el encuentro, el cual iniciará a las 11:00 horas del próximo domingo, las víctimas se atreverán a decir lo que han callado por años. Además añadió que contarán con la presencia de dos invitados: Javier Hernández, representante del alto comisionado de la ONU para los DDHH y la periodista Carmen Aristegui. Solalinde reiteró que en todos estos años ha reinado la impunidad en el caso  y manifestó que la sesión pública del domingo permitirá acercar a la gente que quizá desconoce los hechos y así poder entender lo sucedido. “Estamos experimentando algo que no sabemos cómo vaya a resultar. La sesión es para acercar a la gente lo que significan esos acontecimientos 2006-2007, ¿a qué me refiero?, la comisión de la verdad no va a recopilar datos ya elaborados por otras instituciones o versiones ya elaboradas, no vamos a reciclar nada, no nos interesa dar versiones dichas anteriormente, sino realmente tratar de investigar los hechos”, puntualizó. De igual forma aseveró que esta iniciativa de investigar la verdad representa una amenaza para los presuntos responsables de las agresiones. Afirmó que los que integran la Comisión no se venderán y llegarán hasta las últimas consecuencias. “Esta investigación supone una amenaza para los supuestos perpetradores, y seguramente esta sesión pública será un parámetro para medir varias cosas, una de ellas es el interés de la gente, que ya lo está manifestando, pero también  por parte de las personas que tenemos que investigar sabremos qué reacciones van a tener. Esperamos que esta sesión transcurra pacíficamente, es la primera pero no creo que sea la única, por lo que vamos a tener más, dependiendo las organizaciones y la respuesta de la sociedad. La gente necesita saber que la Comisión de la Verdad no se va a vender, necesita saber que va a llegar a su cometido, que vamos a llegar a esclarecer los hechos, que nunca los vamos a traicionar, que no nos van a doblegar, que tenemos que llegar a sus últimas consecuencias”, manifestó. Solalinde subrayó que los actos de violencia cometidos entre 2006 y 2007 en Oaxaca, son un gran agravio en la historia reciente del país. Aseguró que Ulises Ruíz, gobernador en turno durante los hechos, está respaldado por una red de corrupción e impunidad. “Según las declaraciones de Ulises Ruíz, él aparenta cierta tranquilidad. Ha dicho que no le preocupa la Comisión de la Verdad porque está exento, ya que la justicia lo exentó de todo. La verdad es que él tiene el apoyo de todo un sistema, infraestructura de corrupción e impunidad que le dan esa tranquilidad, osea no le preocupan los resultados que demos, no le inquieta el informe que podamos dar, porque finalmente todo eso va a dar a un aparato de justicia controlado, a pesar de todo, contra toda esperanza, la gente está confiando en hacer lo que nos toca, y nosotros lo vamos hacer, si de parte de las instituciones, de otras instancias del Estado, no hacen lo suyo, quedará en evidencia de parte del Estado, las fallas graves que hay de corrupción e impunidad”, dijo. El sacerdote demandó  que las condiciones políticas en Oaxaca han dificultado la investigación y por ende ha complicado llevar ante la justicia a los presuntos responsables. Recalcó que la Comisión tiene el compromiso de aportar elementos significativos y no fungir como una instancia de trámite. “Esta Comisión tiene la responsabilidad de remover muchas cosas. Hemos insistido que no vamos hacer una instancia solamente para cubrir apariencias o cumplir requisitos, no lo vamos hacer. Sabemos que nuestra atribución es limitada pero nuestra decisión es muy grande, pero así como hay limitaciones hay caminos nuevos con la sociedad civil: los movimientos”, apuntó. De igual forma, indicó que hasta el momento han encontrado errores en los peritajes realizados anteriormente por instancias como la Procuraduría General de la República (PGR), y señaló que no darán por válida cualquier información emitida por instituciones del Estado. “Estamos recibiendo sus testimonios. Nosotros no damos por supuesto nada, no damos como válidos los peritajes o conclusiones que hayan sacado instituciones como la PGR, estamos haciendo nuestras propias apreciaciones, apoyados por personas y nos estamos dando cuenta que hay muchos errores en los peritajes, no quiero adelantar muchas cosas, pero hay errores, pero no queremos partir de supuestos, sino de nueva información, nuevos peritajes y obviamente las conclusiones serán muy diferentes”, finalizó. “La sesión será la primera de su tipo” En palabras de Cuauhtémoc Ruiz, asesor de la Comisión de la Verdad Oaxaca, la sesión pública que desarrollarán el domingo es un hecho sin precedente en México. Indicó que se escogió el día 14 de junio por lo que representa, ya que como se mencionó, en esta fecha, pero de 2006, se presentó la represión por parte de las fuerzas del orden. “Escogimos el 14 de junio porque es uno de los días importantes del movimiento social que hubo en Oaxaca en 2006. El 14 de junio fueron violentados masivamente los derechos de manifestación, de reunión, de asociación de miles de profesores y no sólo de ellos, sino también de otras personas del centro de la ciudad de Oaxaca que de repente, sorpresivamente en la madrugada, aprovechando la noche, llegaron miles de policías con gases lacrimógenos así como con helicópteros. Pero los policías no pudieron lograr su cometido y el plantón continuó, dio comienzo al gran movimiento social que hubo en ese año”, explicó. Ruíz recordó que en los hechos violentos, por lo menos se registraron 26 ejecuciones sumarias y apuntó que de 2006 a 2007, de acuerdo a los datos que han podido recabar, se estiman que se presentaron alrededor de 500 casos de tortura. “Es algo reconocido que hubo al menos 26 ejecuciones sumarias en Oaxaca en 2006. Nosotros hemos hecho algunos hallazgos, no exactamente de otros homicidios, pero sí de los que se pueden calificar como intento de homicidio. Me parce que vamos a ser capaces de demostrar que hubo intentos de homicidio, por ejemplo, hay personas que se han acercado a nosotros que no les han podido extraer balas y que no denunciaron en su momento y para nosotros podían configurar este intento de homicidio.  Al respecto de torturados, un cálculo que le podemos dar con respecto a los datos arrojados en la investigación en ese año, 2006 y 2007,  hubo tal vez uno 500 torturados y torturadas, y eso es terrible porque como sabemos la tortura es un delito de lesa humanidad y no prescribe, y pues mucha gente padeció de esta clase de actos”, dijo. Aunado a lo anterior, comentó que las autoridades no han querido reconocer los hechos de tortura, pues varios casos han sido considerados sólo como malos tratos. Agregó que actualmente están recibiendo un promedio de 80 y 100 personas al mes, que acuden a la Comisión a compartir su testimonio. Asimismo aseveró que la impunidad ha sido la constante, pues de los 26 asesinatos registrados, sólo la CNDH ha podido esclarecer uno. Además, advirtió que se han presentado detenciones irregulares de personas que son señaladas como responsables pero que a la postre se demuestra su inocencia. “Es ampliamente aceptado que fueron 26 los ejecutados de manera sumaria. Puede ser que haya más.  Al menos en este renglón de ejecuciones la impunidad es muy elevada, cuando 24 de los 26 asesinatos no están esclarecidos, no hay responsables, estamos trabajando también en esclarecer alguno de ellos. Estuvo presa una persona sin ser responsable, lo que también habla de la arbitrariedad que continuó de los hechos. Después se capturó a otra persona como responsable de asesinato, estamos investigando si es correcto su encierro”, apuntó. Fuente: Revolucion tres punto cero