Oaxaca.- Capaz de sonar como una banda de alientos completa, los órganos históricos de Oaxaca han demostrado tener una amplia musicalidad, que les permite interpretar lo mismo sones y jarabes que un programa clásico. Por ello, el Instituto de Órganos Históricos de Oaxaca ofrecerá este domingo 4 de octubre, un concierto de Música Regional Oaxaqueña en el órgano tubular del templo de San Jerónimo Tlacochahuaya.
Este concierto protagonizado por el más grande de los instrumentos de viento, tendrá lugar este domingo a las 12:30 horas. La maestra Cecilia Winter ejecutará cada pieza en el órgano de Tlacochahuaya y será acompañada por el percusionista oaxaqueño, Valentín Hernández. Quienes nos llevarán a un viaje musical por las ocho regiones de Oaxaca.
Admirado por organistas y organeros de todo el mundo, el instrumento de Tlacochahuaya fue construido alrededor de 1730 y restaurado en 1991, y se distingue por ser uno de los órganos más bellos en Oaxaca, tanto en su aspecto visual como en su sonoridad. Destaca también, porque el templo que alberga este órgano está ricamente decorado y es catalogado como una joya arquitectónica
La ‘Marcha Gira Triunfal’ de Cipriano Pérez Serna y ‘Llévame Oaxaqueña’ de Samuel Mondragón son las composiciones que marcan el inicio del recorrido musical por la región de los Valles Centrales; en este recital, la región de le Mixteca toma las notas nostálgicas de la’ Canción Mixteca’ de José López Alavez y del festivo ‘Jarabe Mixteco` compilado por Antonio Martínez Corro.
En este concierto de entrada gratuita, el órgano es acompañado por diversos instrumentos de percusión, como el bombo, la tarola y el platillo, que conforman la típica “batería”, además de sonajas, campanitas, un triángulo, un güiro, un tambor tradicional de pueblo y una trompeta de concha de caracol. Sonidos que enriquecen la música oaxaqueña que alegra el corazón de propios y visitantes.
-Acerca del Órgano de Tlacochahuaya
El convento de San Jerónimo Tlacochahuaya fue fundado en 1558 por Fray Antonio de la Serna como refugio espiritual para los frailes que ejercían su pastoral en la ciudad de Oaxaca y sirvió como casa de retiro durante toda la época virreinal.
Aunque no se sabe la fecha exacta de la construcción del órgano, se supone que fue construido alrededor de 1725-30, porque comparte características en su diseño musical, su decoración y la construcción de su caja con los órganos de San Dionisio Ocotepec (1721), Santiago Tlazoyaltepec (1724), San Andrés Zautla (1726), Santa María de la Natividad Tamazulapan y San Pedro Quiatoni (1729).
El órgano fue modificado en el año 1735, fecha cincelada en el tubo más grande de una nueva hilera de tubos (bardón) instalada después de la construcción original. Durante esa intervención se dieron otras modificaciones: los tiradores para controlar los registros fueron cambiados de dos lados del órgano a la fachada; la caja fue pintada con ángeles y músicos y diseños florales policromados para combinar con la decoración interior de la iglesia, y el órgano fue traslado desde abajo de la iglesia al nuevo coro alto.