Oaxaca,México.-A nivel general, la inflación está cediendo en México, es cierto. Sin embargo al observar el comportamiento que han tenido productos como la carne de res, el pollo y el huevo, se observa que estos mantienen un encarecimiento sostenido, según cifras oficiales. A tasa anual, en enero pasado el precio de la carne de res reporta un incrementó 23.67%; el pollo trepó 6.38%, y el huevo 8.84%. En el mismo periodo, el Índice Nacional de Precios al Consumidor se colocó en 3.07%, su menor nivel desde marzo de 2011. “Las presiones sobre los precios de carne de res continuaron, mientras que los precios de los huevos y el pollo aumentaron más de lo que nuestro monitoreo de precios sugería”, puntualizó el grupo BBVA en un reporte. “El componente de carne y huevo ese ya lleva varios meses consecutivos al alza, y la tasa anual se ubica en 14%, que es muy alto”, dijo por su parte la economista senior de HSBC México, Lorena Domínguez. Los productos de la canasta básica registraron un incremento anual de 2.94%. El sector pecuario tuvo un aumento de 14.2%, la mayor tasa en comparación con los porcentajes del mismo mes en 2014 y 2013. “Una parte importante de este descenso [inflación general] tuvo que ver con productos que venían previendo esa disminución como lo fueron las tarifas de telecomunicaciones, básicamente electricidad y gas domestico, entre otros. Esto oculta un poco lo que está pasando para lo que realmente afecta a las familias”, dijo la académica del departamento de Economía y Finanzas del Tecnológico de Monterrey Campus Santa Fe, Haydeé Elena Moreyra García. La mayoría de estos incrementos golpean a los bolsillos de la clase media y de escasos recursos, señalaron especialistas, quienes agregaron que el alza de precios en los alimentos no va acorde con el incremento del salario mínimo. “Recordemos que ha habido un periodo un tanto difícil para los mexicanos para adquirir ciertos bienes y servicios, también existe un componente de debilidad de consumo que viene ligado mucho a la parte del salario”, dijo la académica del Tec de Monterrey. Pese al alza en algunos productos pecuarios, también hubo descensos, como el del jitomate, que tuvo un retroceso mensual de 38.7%. Los especialistas descartaron que la debilidad del peso frente al dólar tenga una repercusión mayor en los precios a corto plazo, por lo que la meta del Banco de México (Banxico) se mantendrá en el objetivo de 3% (+/- un punto porcentual). “El traspaso del la depreciación hacia la inflación es muy moderada, pudiera haber un cierto traspaso pero no sería realmente sustancial”, comentó la analista de HSBC. Sin embargo, la depreciación sostendia del peso representa un riesgo al alza, agregó.