Termina restauración en el Templo de San Felipe Neri

Oaxaca.- Ante el compromiso del Gobierno de Oaxaca de rescatar el patrimonio cultural y arquitectónico en la entidad, el Director General del Instituto del Patrimonio Cultural (INPAC) Jorge Alberto Valencia Arroyo, entregó la tercera etapa de la restauración del Templo de San Felipe Neri, de la capital de estado, cuyas obras representaron una inversión de un millón y medio de pesos.   El titular del INPAC explicó que con las aportaciones del Gobierno del Estado y del Fondo de Apoyo a Comunidades para la Restauración de Monumentos y Bienes Artísticos de Propiedad Federal (FOREMOBA 2013) del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, así como de la Fundación “Alfredo Harp Helú”, se restauró los cuatro retablos medallón laterales con los que cuenta el templo, mismos que datan del siglo XVIII (1757).   Los trabajos realizados en los cuatro elementos ornamentales del recinto constaron en la limpieza superficial y química de los retablos, fumigación, liberación de elementos ajenos, fijado de piezas sueltas, consolidación y resane de la base de preparación; reposición de elementos y fragmentos de elementos decorativos faltantes, reintegración cromática y aplicación de lámina de oro, así como la conservación y restauración de las pinturas de caballete.   En tanto, el presbítero del Templo de San Felipe Neri, Modesto Primitivo Sierra Canseco, agradeció al Gobierno de Gabino Cué Monteagudo el apoyo brindado para la restauración del inmueble, el cual es visitado por oaxaqueñas y turistas que visitan la capital del estado, ya que posee una belleza arquitectónica y ornamental.   Los retablos medallón del Templo de San Felipe Neri   En los retablos del Templo de San Felipe Neri se observan cuadros de caballete en los espacios centrales de los medallones, con la advocación en cada uno de ellos, hacía San Miguel Arcángel, San Rafael Arcángel, San Gabriel Arcángel y el Arcángel Zadkiel.   De acuerdo a las investigaciones realizadas por la restauradora Marina Raquel Straulino Muñoz de Cote; tres de estos cuadros pudieron provenir de la Catedral de Oaxaca, y al tener un formato rectangular, fueron modificados para que pudieran ser colocados en los espacios lobulados de los medallones.   Además, se identificó que la pintura de caballete de San Gabriel, la cual es de creación reciente, posiblemente de principios del siglo XX, por lo que su gama de color es más oscura, ya que intentaron imitar los cuadros antiguos que se encontraban sucios con un barniz oxidado.   Cada uno de los medallones cuenta con  una dimensión de cuatro metros de ancho por seis  metros de altura y sus pinturas de caballete miden 1.40 metros de ancho por 2.40 metros de altura.   Como particularidad, presentan una peana central y un espacio lobulado que posiblemente haya sido utilizado para la colocación de una escultura, sin embargo actualmente se encuentran colocadas pinturas de caballete.   Detrás de esas pinturas de caballete se encontraron evidencias de un cortinaje tallado en madera, lo cual puede justificar la hipótesis de que estos medallones fueron realizados para resguardar esculturas.   Con estas acciones, la Secretaría de las Infraestructuras y el Ordenamiento Territorial Sustentable patenta su compromiso por restaurar y preservar el patrimonio cultural y arquitectónico que caracteriza al estado como destino turístico en el país.