Lilia TORRENTERA G.
Oaxaca.- La ola de repudio contra las autoridades municipales que no disimulan su ignorancia respecto al arte, obligó que a menos de 24 horas de colocar en una esquina de la explanada del templo de Santo Domingo, otra de las grotescas esculturas Fernando Andriacci con una figura de un cristo, ésta fuera retirada con grúa la mañana de este domingo 5 de junio mientras que el diputado federal Francisco Martínez Neri llamó a respetar el espacio público.
Las redes sociales los memes y comentarios contra el artista consentido en el gobierno de Javier Villacaña, fueron incisivos para protesta por la nueva imposición del arte que califican de bizarro realizado por el pintor y ahora escultor cuicateco.
Al respecto el diputado federal Francisco Martínez Neri opinó sobre la urgencia de que el Municipio de Oaxaca emita ordenanzas que promuevan la participación ciudadana sobre el uso de los espacios públicos.
“No es posible que la ciudad sea escaparate para los gustos personales de los gobernantes con respecto a sus artistas preferidos”, indicó
Quien fue Secretario de las Culturas y Artes (SECULTA), consideró que la difusión del arte y la cultura a nivel municipal, tiene que ceñirse al respeto del espacio público y a quien lo disfruta que son los habitantes de la ciudad.
Expuso, no es válido monopolizar para imponer obras artísticas cuando es deber de la autoridad, abrir el espacio público a los consumos culturales que reclama la sociedad.
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Foto Miku[/caption]
Severos críticas ha recibido Andriacci con la siembra de sus esculturas en diversos puntos de la ciudad, muchas de ellas, obstruyendo el paso de las y los trasuntes como fue el caso de un caballo expuesto al frente de la catedral metropolitana sobre la banqueta de la avenida Independencia.
Con su escultura de un cristo montada en una base negra con letras blancas que resaltan la desfigurada estítica del autor, se colmó la paciencia ciudadana y los reclamos vía memes no se hizo esperar.
De ahí de que con un gasto adicional al erario público para el pago de una grúa, el Gobierno Municipal retiró la escultura pintada de un rojo chillante que la hacía insoportable para la vista de quien se hubiera atrevido a mirarla.