Oaxaca.-  El defensor de derechos humanos del Pueblo de Oaxaca, Arturo Peimbert, aseguró que durante el operativo policiaco del 19 de junio, en Nochixtlán, Oaxaca, se cometieron excesos y violaciones graves a los derechos humanos por parte de autoridades federales contra pobladores y niños que tuvieron que huir a una comunidad aledaña. Ante senadores y diputados de la la Comisión de Seguimiento al caso Nochixtlán, el defensor acusó que el evento del día 19, donde perdieron la vida ocho personas y hubo más de 150 heridos, dejó marcada a la población, sobre todo a los menores. Peimbert Calvo aseguró que el desalojo de la carretera  tomada por los pobladores lo consiguieron en 15 minutos, sin embargo, los elementos de la Policía Federal avanzaron hacia el centro comunidad y a la colonia 20 de noviembre donde tuvieron que huir unos 30 menores que estaban en una escuela protegiéndose del gas lacrimógeno. “Los niños estaban bajo riesgo, los niños dijeron que se pusieron pecho tierra y se cubrieron con la tierra porque dijeron que ellos sentían que morían con el gas que estaban respirando. Una madre les ayudó a encontrar una vereda para huir y se fueron hasta la comunidad vecina de Sinaxtla. “Nos parece que esto es gravísimo, desde la perspectiva de derechos humanos, nos parece impensable, que tuviera que huir población infantil por la incursión policiaca, es un tema inhumano por parte de quienes operaron esta incursión”, apuntó el defensor. Señaló que, de acuerdo con los testimonios recabados, no se usaron los protocolos para el uso del gas lacrimógeno que señala que éste se debe lanzar en “parábola” para no lastimar a la población, pero hay evidencia que se hizo de manera frontal. El ombudsman de Oaxaca detalló que hubo 198 heridos, 155 de ellos civiles y 43 policías, de los cuales 84 por disparos de armas de fuego. Sin embargo, aclaró que no se conoce la cifra exacta de heridos y lesionados por el temor que tiene la población a ser criminalizada. Denunció que elementos de la Policía Federal impidieron al personal médico del hospital comunitario de Nochixtlán que atendiera a la población civil, “ni en estado de guerra se ven estos problemas”, además que hubo una actitud “inquisitoria” a quienes lograron la atención médica. El defensor de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca pidió un punto de acuerdo para atender a lesionados, así como a las familias de las víctimas mortales.