Guadalajara, Jal.- ¿Puede el planeta seguir abasteciendo los niveles de consumo que está alcanzando el ser humano? Esa pregunta reunió a los investigadores Lorena Aguilar, Ana Cristina Rossi, Jaime Urrutia e Itiziá Castañeda en la mesa titulada “¿Hemos llegado al límite del planeta?”, como parte del programa ¡La FIL También es Ciencia!, que se lleva a cabo en el marco de la 30 Feria Internacional del Libro de Guadalajara.
[caption id="attachment_350417" align="alignleft" width="402"]
Jaime Urrutia Foto: ©FIL/Nabil Quintero[/caption]
La conversación se centró en el cambio climático y su impacto desde una mirada sociocultural. Para abordarlos se plantearon tres perspectivas: el cambio climático desde la perspectiva de género —es decir, ¿de qué forma repercute el fenómeno ambiental en hombres y en mujeres? —, el impacto del cambio climático en las especies naturales y las repercusiones del calentamiento global en los diferentes ámbitos socioeconómicos.
Al principio de la conversación se percibía cierto escepticismo por parte del auditorio, en su mayoría jóvenes. Sin embargo, conforme las presentaciones transcurrían, los asistentes comenzaron a mostrar más interés en dialogar. Las preguntas no se hicieron esperar, y algunos estudiantes interrumpieron la ponencia para conversar con los invitados, que se mostraron amables y abiertos al diálogo. Ana Cristina Rossi preguntó de manera contundente: “¿Hemos llegado al límite de la existencia humana?”, aludiendo a la incertidumbre que ha tomado parte de las reflexiones de los científicos que han inclinado su trabajo hacia el estudio de este fenómeno.
Itiziá Castañeda extendió la invitación al público presente, con especial atención a los jóvenes que en esta ocasión visitaron la FIL, a pensar en cómo combatir el cambio climático por medio de acciones como la reducción de emisiones de carbono y la preservación del agua, y a pensar en esta problemática desde una búsqueda permanente por la igualdad entre hombres y mujeres de diferentes estratos económicos, además de hacer una profunda reflexión sobre los impactos de este cambio en lo social, bajo el argumento de que dicho fenómeno climático es un tema de desarrollo y también es una cuestión de derechos humanos.