Oaxaca.- El Panteón Jardín será la sede durante más de 10 horas de música continúa con las que los hijos, amigos y alumnos del músico tradicional Narciso Lico Carrillo (Oaxaca, 18 de marzo, 1956-Oaxaca, 2015) le brindarán un emotivo homenaje al artista oaxaqueño fallecido el 5 de agosto de 2015.
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Foto: Toamada del Muro del maestro Lico Carrillo en Facebook
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“En Oaxaca vamos a festejar su cumpleaños quizá no de la manera en la que lo quería él, por algunas situaciones familiares, pero estaremos desayunando, comiendo y disfrutando de la música que nos dejó el maestro Lico, por lo cual la gente que guste y quiera celebrar será bienvenida”, destacó en entrevista Raúl Lico Ventura.
El hijo y continuador de la obra de Narciso Lico Carrillo también conversó sobre la influencia de su padre en su vida y obra, además de revelar el nombre de dos canciones que le ha compuesto como homenaje:
Las campanas de Betaza y
Mi amigo el chapulín.
“Las campanas de Betaza es un jarabe inspirado en Betaza, el pueblo donde se crió el maestro Lico. Tiene una relación con lo que le pasó y describe el momento cuando llegó uno de sus mejores amigos y me dijo ‘acabamos de mandar a repicar las campanas de Betaza’.
Mi amigo el chapulín es una pieza con toques oaxaqueños. Se estrenará aquí en la ciudad el 2 de abril en el Teatro Macedonio Alcalá. Es una obra que me estuvo cuidando el maestro Lico desde que la compuse. Está inspirada en él y remite a cuando estábamos en Los Angeles que él decía insistentemente ‘yo ya me quiero ir para Oaxaca’, entonces trata del amor que le tenía al estado, agregó.
“Con mi música lo que quiero es dar alegría a mi gente y dejar por un momento de lado las tristezas”. Se le escuchó decir muchas veces a Narciso Lico Carrillo, sobre todo minutos después de recibir, en 2013, el Premio Nacional de Artes y Tradiciones Populares.
Lico Carrillo fue un músico humilde, sincero y muy responsable con su trabajo y en todo lo que hacía a pesar de que no cobraba ni un peso por hacerlo y sin esperar recibir un premio a cambio.
Narciso Lico también fue un compositor destacado, arreglista, copista y desde 1990 forjador de varias generaciones de nuevos músicos, bandas y directores, a quienes enseñó que el mayor legado de un artista es que su música ayude a defender su cultura, “sus tradiciones, sus raíces y lo que nos identifica como oaxaqueños”, relató Lico Ventura.
Lico Carrillo inició su formación musical a los 12 años aprendiendo a tocar el bombo, saxor, saxofón alto y la trompeta, y desde 1970 mantuvo un intenso periodo como músico y compositor, esta última faceta también desarrollada por Raúl Lico.
Comentó que al maestro Narciso Lico le gustaba componer marchas fúnebres, pero contrario a sus gustos musicales, decía que tenía que hacer obras con las que la gente bailara, gritara de emoción, se riera, “lo único que quería era darle alegría a su gente”.
El legado del maestro Narciso está integrado por más de 500 piezas propias y más de dos mil arreglos para sonoras, danzoneras y mariachis, entre otras agrupaciones. Está conformado por diversos géneros musicales: boleros, cumbias, danzones, jarabes, marchas, misas, oberturas, polcas, sones, valses y zapateados.
“Toda la obra del maestro Lico me gusta mucho, es muy rica, bonita. Particularmente me agrada una que me compuso, el danzón
Quiero un café, con el que me identifico porque todo el tiempo estoy tomé y tomé café”.
Muchas de estas obras originales han sido resguardadas en diversos recintos, destacando el Archivo Musical del Centro de Capacitación Musical y Desarrollo de la Cultura Mixe ubicado en Santa María Tlahuitoltepec, Oaxaca.
Desde su fundación, en noviembre de 1977, este recinto ha creado un fondo de las obras más importantes de los artistas regionales compuesto por material recopilado de diferentes acervos y aunque la mayoría de las partituras que resguardan son fotocopias no dejan de ser valiosas.
En 2011 Narciso Lico Carrillo integró el Consejo de Participación para el Desarrollo Cultural del Estado de Oaxaca, instancia ciudadana de la Secretaría de las Culturas y Artes de Oaxaca. En 2012, impulsó la creación de la Asociación Civil denominada Directores, Compositores y Banda Infantil, Juvenil del Estado de Oaxaca (BIJEO), conformada por una veintena de músicos oaxaqueños, directores de bandas y académicos que hacen circular una escaleta móvil estatal de perfeccionamiento musical para maestros y alumnos de bandas de música tradicional.
Su trabajo de promoción de la cultura musical de su estado y su prolífica producción le hicieron acreedor a numerosos reconocimientos, como el de la estación de radio XEGLO (Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas), del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes a través del Sistema Nacional de Fomento Musical, en el 7° Encuentro Nacional de Bandas en 2002, y del ayuntamiento de Oaxaca de Juárez en 2012.
Asimismo, se reconoció su trayectoria en el evento inaugural de Instrumenta 2011 y desde el 18 de octubre de 2015, como homenaje póstumo, en Santa Ana del Valle, Tlacolula, se encuentra el Centro Cultural para el Desarrollo de las Bandas de Música Tradicional del Estado de Oaxaca Maestro Narciso Lico Carrillo.