La Columna Rota/ El Corazón de México; esta sangrando

Oaxaca.- El pasado 5 de agosto por la tarde Antonio de 11 años, asesinó junto con su amiga Viviana, de 14, a la pequeña Paola de 10, los hechos ocurrieron en la Localidad El Terrero, en el municipio de Namiquipa, en el estado de Chihuahua; la noticia debería de desgarrarnos, cimbrarnos, sin embargo, no es así.

José de 15 años se encontraba molestó con Lorena su mamá, la única solución que encontró para dejar salir esa emoción fue asesinar a su hermana, tía y a la propia Lorena, su madre.

El pasado 7 de agosto, en Puerta Cañada, en el municipio de Cañada Morelos, en el Estado de Puebla; fueron encontradas asesinadas Lorena R, de 38 años, Jazmín P. De 25 y Perla Carmen de 18. José intento deshacerse de los cuerpos, enterrando a Jazmín y Perla, a su madre la arrojó en un pozo.

¿Qué lleva a estos menores a asesinar?, ¿qué han visto?, ¿qué les hemos enseñado?, ¿en qué los estamos convirtiendo?

Los niños aprenden del contexto en que se desarrollan, aprenden de lo que ven, de lo que escuchan, de lo que a diario observan, ¿nos sorprende que los niños y adolescentes asesinen? No deberíamos de hacerlo, solo debemos encender el televisor a la hora que usted guste para ver el grado de violencia que se muestra, en caricaturas, telenovelas, las noticias a diario locales y nacionales son de asesinatos, de gente sádica que asesina mujeres, hombres, niños.

El nivel socioeconómico de estas familias pertenece a la mayoría de los habitantes de este país, gente trabajadora, que solo alcanza a sobrevivir, con los pocos pesos que obtiene, lamentablemente la violencia no solo alcanza ese status social.

Sí, mucho tiene que ver la falta de justicia en este país por eso es más fácil cometer delitos y dejarlos pasar porque probablemente no te atrapen, sin embargo, debemos también asumir nuestra responsabilidad como padres, como sociedad.

Estamos creando generaciones intolerantes, generaciones que dejaron de tener miedo, que dejaron de conocer las consecuencias de sus actos, y eso lo enseñamos en casa, no tiene nada que ver con la escuela donde los maestros dejaron de ser la respetable autoridad que eran cuando nosotros fuimos niños.

Nosotros como sociedad, como adultos, como padres debemos de entenderlo, las autoridades no van a hacer nada por evitar que estos hechos se sigan suscitando en nuestro tan lastimado país.

El corazón de esta sociedad no deja de sangrar, a diario solo vemos corrupción, asesinatos, feminicidios, muerte, impunidad.

Como familias dejamos de apoyarnos, la amistad se quedó varada en un charco de mentiras, de dolor, no sé usted, pero al menos todos los días despierto con la emoción de pensar que esto es solo una novela de una mente buscando escudriñar en las vidas de cada uno de nosotros.

Sin embargo, me doy cuenta que no, los 888 feminicidios en lo que va de este 2016, son reales, los ajustes de cuentas entre “carteles” que dejan a diario decenas de hombres asesinados de manera cruel son parte de nuestro diario vivir.

Sí, el mundo se ha convertido en una gran batalla, niños que matan niñas, niños que matan a sus madres, madres que matan a sus hijas, hombres violando, asesinando niñas de 3, 5, 6, 7, 14 años.

Esta es nuestra realidad y algo debemos hacer para detener tanta violencia; sencillo es dejar de leer este tipo de comentarios, o no ver las noticias porque te enfermas…

Asumiendo el clásico si no lo veo, no existe… pero gente, existe y tenemos ya que exigir justicia, que los feminicidios sean tipificados, que los rija una sola ley, que no lo determine el criterio de algunos, que no se queden en los procesos, que dejen de calificar feminicidios como homicidios dolosos, que los medios de comunicación dignifiquen las muertes de todas, no solo de algunas que mediáticamente se deben de dar a conocer para golpear a algún gobernador.

No, ya basta que sigamos impávidos, que veamos cómo se desangra el corazón de un país que pide y debe en base a la educación, re enseñar los valores que teníamos y plantarlos nuevamente en quienes vienen detrás de nosotros.

Sé que esto no se va a detener, pero algo debemos empezar a entender, estamos solos y los que tienen el poder se congratulan de ver como nos estamos matando…No sé piénselo…

10 de agosto 2016

@FridaGuerrera