Realiza disculpa pública la SSP por violaciones a derechos humanos

Oaxaca.-La Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca atestiguó el acto de reconocimiento de responsabilidad y disculpa pública que realizó la Secretaría de Seguridad Pública por violaciones a los derechos humanos de los ciudadanos Manuel Hernández Castellanos, Itzel Castellanos Martínez y Luis Antonio Contreras Castellanos, el último de los cuales perdió la vida en agosto de 2012, tras ser agredidos los tres por elementos de la Policía Estatal en un retén de la comunidad de Reyes Etla. Durante el acto de reconocimiento de responsabilidad realizado este lunes 30 de octubre de este año, Neftalí Mendoza Morales, Director de Asuntos Jurídicos de la SSP, al rendir la disculpa pública a los familiares del difunto Contreras Castellanos y a la víctima Hernández Castellanos, dijo que el acto de reconocimiento de la autoridad por la falta que cometieron sus funcionarios, es asumir la responsabilidad de la institución, así como una acción que manifiesta su compromiso porque hechos tan lamentables no se repitan. Mendoza Morales expuso que, aun cuando parte del daño es irreparable, la disculpa espera restituir algunos de los derechos humanos violentados a las víctimas y sus familiares, y agregó que la actual administración está comprometida con la protección y reconocimiento de los derechos humanos, pues aunque los hechos ocurrieron en la administración anterior, la institución asume la responsabilidad de cumplir con la recomendación de la Defensoría. El representante de la Secretaría de Seguridad Pública agregó que la instancia está comprometida con que este tipo de hechos no se repitan, para lo cual realiza acciones de capacitación en materia de derechos humanos con su personal, pues reconoce su responsabilidad de proteger, garantizar y respetar estos derechos. La Defensoría de los Derechos Humanos recordó que por este caso emitió la Recomendación 07/2013, dirigida a la SSP, porque en el Municipio de Reyes Etla, Oaxaca, un policía realizó disparos de arma de fuego a la unidad de motor marca Nissan, tipo Tsuru, color guinda sin placas de circulación, en la que viajaban el joven Contreras Castellanos, el señor Hernández Castellanos y la niña Castellanos Martínez, privando de la vida al primero y lesionando al segundo. La Defensoría añadió que otros cuatro elementos de la Policía Estatal que estaban en el lugar durante dicho acontecimiento, no dieron aviso oportuno a sus superiores respecto al incorrecto uso de la fuerza que tuvo como resultado la pérdida de la vida de una persona. Debido a esto, la Defensoría recomendó a la SSP girar sus instrucciones al presidente del Consejo Estatal de Desarrollo Policial, a fin de realizar las diligencias pertinentes para determinar el procedimiento administrativo de investigación, bajo el número de expediente SSP/CEDP/E.A/060/2013, iniciado para sancionar a los elementos de la policía estatal involucrados. La Defensoría de los Derechos Humanos también solicitó que, para reparar integralmente el daño causado, de acuerdo con el criterio sostenido por la Corte Interamericana de Derechos Humanos, en coordinación con las partes se ofreciera una disculpa pública a las víctimas de las violaciones a derechos humanos cometidas. El organismo defensor también recomendó que, como parte de la reparación integral del daño a las víctimas, se fijaran las bases, conceptos y montos que se debían otorgar como reparación del daño por la pérdida de la vida de una de las víctimas, y por las lesiones, así como el daño psicoemocional causados a la segunda y tercera víctimas. La institución autónoma también pidió que en forma exhaustiva se revisara y analizara el expediente de los elementos de la Policía Estatal, a fin de verificar que cumplan con el perfil requerido para realizar las funciones policiales. Además, la Defensoría pidió a la SSP que realice capacitaciones en materia de derechos humanos, específicamente en el manejo y uso legítimo de la fuerza pública, así como capacitaciones permanentes sobre el uso legítimo de la fuerza para evitar transgredir los derechos humanos de las personas.