Oaxaca.-Así lo advirtió la calificadora de riesgo, al destacar que los choques externos han jugado un papel importante, en particular con el ascenso de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos.
La posibilidad de una degradación de la nota A3 con perspectiva negativa ha repuntado, pero no de sobre manera, admitió Jaime Reusche, analista senior de la calificadora de riesgo.
Los principales factores que vigila Moodys son la relación de deuda con el Producto Interno Bruto (PIB) de casi 50 por ciento, y el déficit fiscal.
Según el analista, el gobierno mexicano ha mostrado disciplina para reducirlo y lograr su meta de superávit primario este año.
Sobre el aumento de deuda externa en dólares y la dificultad del gobierno para cubrir sus obligaciones por la debilidad del peso frente al dólar, el analista admitió un riesgo, pero neutralizado por los ingresos petroleros que benefician al presupuesto, pues éstos se perciben en moneda extranjera.
El último cambio que realizó Moodys a la calificación ocurrió en marzo, cuando modificó la perspectiva estable a negativa, después del recorte presupuestal de 100,000 millones de pesos (mdp). El lapso para hacer un cambio en la perspectiva será de entre 12 y 18 meses.