Oaxaca.- El gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, aseguró que la inflación en México alcanzó su punto más alto en agosto pasado, por lo que mantuvo su expectativa de que el índice de precios regrese a rangos de 3% a finales del año próximo.
“En octubre se situó en un rango de 6.30 por ciento alcanzando su punto más alto en agosto pasado y se espera que dicho incremento sea temporal y converja a su objetivo de 3 por ciento a finales de 2018”, dijo.
Al participar en la edición 60 del Premio Citibanamex de economía, Carstens señaló que el aceleramiento en la inflación durante el 2017 se debió fundamentalmente a la liberalización de los precios de los energéticos en el país y en particular de los de las gasolinas, así como el incremento a diversos precios de productos agropecuarios y del salario mínimo.
“Si bien los efectos de los choques en la medición de corto plazo y de la inflación han sido importantes, se espera que sus efectos sean solamente temporales”, apuntó.
Por otra parte, el gobernador del banco central pidió ser prudentes con el posible aumento al salario mínimo general, que se determinará en los próximos días entre empresarios, sindicatos y el gobierno federal.
“Lo que recomendamos es prudencia (…) no se pueden aumentar (los salarios) de manera sostenible por decreto, hay que respaldar cualquier aumento que se quiera a través de mayor productividad”, expresó.