De acuerdo con la CNDH, personal del IEEPO utilizaba la violencia física y psicológica como forma de castigo contra los menores y no adoptó medidas de protección en favor de las víctimas ni implementó protocolos de atención y prevención de la violencia escolar.
En 9 de 41 casas no se cumplen con las condiciones de habitabilidad adecuada para albergar personas porque están deterioradas, tienen humedad, filtraciones y daños estructurales que ponen en riesgo a los menores que ahí pernoctan.
A los ocupantes de 10 casas y 2 comedores se les detectaron afectaciones a la salud y desnutrición infantil.
En total, la CNDH visitó 10 de los 21 Centros Coordinadores para el Desarrollo Indígena en el Estado de Oaxaca y 41 casas y 6 comedores del niño indígena.
El organismo solicitó a la CDI otorgar prioridad y solicitar presupuesto para rehabilitación, mantenimiento y mejoramiento de las casas y comedores.