Salvador José. Oaxaca.-En la conferencia  “¿Después de las Concesiones qué? Medios y Territorios”   en el “Libre Espacio la Jícara”, -quizá el único espacio en la ciudad de Oaxaca- donde se abordan problemáticas socio- políticas, que afectan a la entidad. El panel estuvo  conformado por Griselda Sánchez, Periodista radiofónica, Melquiades Blanco, Comunicador, Socorro Spreza, Académica de la Facultad de Derecho de la UNAM, Joe Bryan, profesor de geografía de Colorado. Y Kiado cruz, coordinador de la mesa. Entre otras cuestiones se señaló las repercusiones de concesionar las mal llamadas radios “piratas”, y digo mal, porque lo de “piratas”, es sinónimo de latrocinio o saqueo, algo que está muy lejos de la función que realizan las radios comunitarias en el estado de Oaxaca. Vale mencionar que en una ocasión que me encontraba en la Sierra Norte, tuve la oportunidad de escuchar el llamado de auxilio –por medio de una radio comunitaria- que hacía a las comunidades  vecinas para que acudieran a sofocar un incendio que devoraba el bosque de una comunidad aledaña. Como este, son cientos los servicios sociales que proporcionan las radios comunitarias, “cerca de ochenta y cien” –según la agencia Quadratín- distribuidas en todo el estado de Oaxaca. A pesar que en el Convenio 169, de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), señala que las comunidades indígenas tienen el derecho de realizar sus propias estaciones de radio con barra de programación conveniente a sus intereses. Salvaguardar sus recursos naturales, prevenir enfermedades o proporcionar ayuda en catástrofes naturales, en la lengua materna, cuando la población sea monolingüe. Lo inconcebible, es que a veinte años -que al contrario de lo que dijera el tanguista Carlos Gardel-, si son muchos. No se haya podido formar, una organización, una red, una federación, organización nacional, incluso latinoamericana, para hacerle contrapeso a las políticas neoliberales que  algunos gobiernos latinoamericanos, entre ellos el de México,  socaban día tras día –leer encabezado en la primera plana de   “La Jornada” del 10 de junio- las comunidades indígenas. Y Oaxaca, es el estado que tiene mayor número de grupos étnicos, más de dieciocho lenguas originarias con sus variantes dialectales, costumbres y tradiciones, únicas en el orbe. Que hace del estado sureño, único en el mundo. Por el contrario, uno de los participantes en dicha mesa, argumentaba que aunque no pagaban dinero para que les permitieran tener sus concesiones, a cambio, tenían que transmitir obligatoriamente, los spots promocionales de todos los partidos políticos, ¿aunque fueran comunidades que se rigen por el sistema de usos costumbres?. ¡Grave retroceso!. Ya que la línea neoliberal, va desde privatizar las el agua, los recursos minerales y naturales, el petróleo, los litorales, y por supuesto ¡las  ondas hertzianas! Esto, obviamente para que no obstaculicen el proyecto neoliberal en marras. Sin embargo, y a pesar de tener   el gobierno federal a las comunidades entre “las cuerdas” , este está comprometido, según indicaciones de la canciller alemana –de visita en México- Angela Merkel , para que su país invierta en México. Que los derechos humanos y “la libertad de la prensa” debe ser respetada, ya que sólo los que representan esta libre expresión son los periodistas independientes”. Subrayando que Alemania “está cooperando en la promoción del estado de derecho; cooperación que ampliamos el año pasado. Y sabemos, por supuesto, lo dramático que son las desapariciones. Es importante que esto se castigue y que se encuentre a los culpables”. Hay que señalar que un gran número de periodistas, sobre todo de radios comunitarias, y defensores ambientales indígenas, han sido abatidos por defender sus recursos naturales y ejercer la libertad de expresión. Por eso la canciller alemana puntualizó que “cooperamos con la Procuraduría General de la República y con las asociaciones que representan a las víctimas”. Hay que señalar, que México ocupa el primer lugar en asesinatos a periodistas y defensores de derechos Humanos ¡en el Mundo!. Lógicamente, esto no es gratuito, va de por medio la protección de sus connacionales y sus empresas, así que si el gobierno priista de Enrique Peña Nieto, no ratifica su política encubridora, las ansiadas inversiones extranjeras. Brillaran por su ausencia ¡Así de fácil!