Agencias Oaxaca.- En la noche de Día de Muertos, decenas de catrinas marcharon de la Catedral Metropolitana al Hemiciclo a Juárez para protestar contra la ola de crímenes en contra de mujeres que se vive en el país, así como para exigir implementar una Alerta de Violencia de Género (AVG) en México. Reclamaron justicia por las más de 22 mil mujeres que han sido asesinadas de 2007 a 2016 en el país, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). “¡Ni una más, ni una más, ni una muerta más!”, “¡No fue suicidio, fue feminicidio!”, fueron algunas de las consignas que gritaron los manifestantes, la mayoría vestidos con atuendos de colores oscuros. En el recorrido, una de las familiares de víctimas de feminicidios que encabezaban la protesta era Araceli Osorio, madre de Lesvy Berlín Rivera, quien fue hallada ahorcada en un teléfono público en Ciudad Universitaria el pasado 3 de mayo. “Ellas (las mujeres asesinadas) querían vivir y esos asesinos les arrebataron la vida y sus sueños; nos la arrebataron. Vamos a seguir adelante. Exigimos la activación de la Alerta de Género en todo el país”, dijo Osorio. Además, pidió justicia en el homicidio de su hija y castigo para Jorge Luis González Hernández, quien, según la Procuraduría de Justicia capitalina determinó que no fue el asesino de la joven, sino que sólo fue responsable “de haber presenciado el suicidio y no haber hecho nada para detenerlo, resolución con la cual no estamos de acuerdo”. Araceli Osorio afirmó que uno de los objetivos de la manifestación también fue para solicitar la implementación de una AVG en el país para atender esta problemática. “Ante las alertas negadas por algunos estados, nosotros decimos que es urgente y necesario que se implemente a nivel nacional. No sólo los gobierno locales deben poner atención y actuar en consecuencia, sino que debe ser en el país”, dijo. Demandó a las autoridades competentes a juzgar a los culpables de feminicidios con perspectiva de género, ya que, en muchos casos, como el de su hija, la determinación es que las víctimas se suicidaron. “No fue suicidio, fue feminicidio. Cuántos feminicidios permanecen en la oscuridad porque las autoridades no hacen su trabajo y terminan dictaminándolos de manera injusta como suicidios. Que se investigue y procese con perspectiva de género es lo que necesitamos de las autoridades encargadas y de la procuración de justicia en México”, aseveró.