Oaxaca.- La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), uno de los organismos privados más importantes del país, rechazo el Acuerdo para el Fortalecimiento Económico y la Protección de la Economía Familiar convocado este miercoles por el presidente Enrique Peña Nieto, por considerar que las medidas no fueron consultadas debidamente y por lo mismo, es riesgo de convertirse en una “estrategia de comunicación o imagen pública” en favor de la cuestionada presidencia.
En un documento público emitido por este órgano epresarial con el título "Por qué no firmanos el acuerdo", y ras una amplia consulta a los diferentes Órganos de Gobierno y grupos técnicos, así como a los 65 centros empresariales en todo el país, la Coparmex "ha decidido no suscribir el acuerdo”.
Se reveló que que el gobierno propuso a los organismos empresariales suscribir el acuerdo apenas el viernes 6 de octubre. Aunque fue discutido el fin de semana, la propuesta final fue entregada dos horas antes del anuncio del acuerdo.
La Coparmex indicó que coincide en la urgencia de un acuerdo pero que éste debe ser resultado “de un verdadero y amplio consenso social”, y no sólo sirva como “estrategia de comunicación o imagen pública”.
¿POR QUÉ NO FIRMAMOS EL ACUERDO?
El pasado viernes 6 de enero, el Gobierno Federal propuso a los organismos
empresariales agrupados en el CCE, suscribir un documento para presentarlo el
lunes 9 de enero como el “Acuerdo para el Fortalecimiento Económico y la
Protección de la Economía Familiar”.
Aunque el fin de semana se estuvieron discutiendo la estructura y contenido del
documento, la propuesta final con el texto fue entregada por el Gobierno Federal
a las 11:00 horas de este lunes 9 de enero, 2 horas antes de su firma pública.
Luego de una amplia consulta a los diferentes Órganos de Gobierno y grupos
técnicos, así como a nuestros 65 Centros Empresariales en todo el país, la
Confederación Patronal de la República Mexicana ha decidido no suscribir el
Acuerdo por las siguientes razones:
• La situación económica y social actual exige sí un amplio acuerdo, un
amplio consenso de todos los sectores sociales.
• México necesita estar más unido que nunca.
• Dicho consenso no se puede construir en 3 días.
• Urge un acuerdo sí, pero es más importante que dicho acuerdo sea fruto de
un verdadero y amplio consenso social, y no solo sirva como estrategia de
comunicación o imagen pública.
• Cualquier acuerdo que se quiera suscribir deberá incluir metas claras,
objetivos puntuales, métricas que sirvan para evaluar los avances.
• El momento exige que todos los actores, todos, asuman compromisos
concretos en beneficio del país.
• Particularmente, el Gobierno, quien administra los recursos públicos, está
obligado a asumir compromisos específicos para mejorar el manejo del
presupuesto, eficientarlo, transparentarlo y, en su caso, corregir o castigar
su mal uso.
Prensa y Comunicación
No estamos en contra del Gobierno, ni de quienes suscriben el Acuerdo, por el
contrario: estamos en favor de un acuerdo real, de compromisos concretos, en
beneficio de todos los mexicanos.
No solo eso, sino que es justo en este momento cuando el país nos demanda un
diálogo real, cara a cara, donde pongamos por delante el Bien Común, antes que
cualquier otro interés particular.
Un verdadero Acuerdo Nacional requiere ser inclusivo y producto de una profunda
reflexión y proceso de consenso social.
Por otro lado, reiteramos que seguiremos trabajando junto con todos los
organismos del Sector Privado, dentro del Consejo Coordinador Empresarial, para
generar las condiciones adecuadas para impulsar el desarrollo que todos los
mexicanos necesitamos.
Coparmex ha sido reconocida en la sociedad como la “consciencia del sector
privado”. Pues bien, es esa conciencia precisamente la que hoy nos impide
suscribir un acuerdo improvisado, incompleto e insuficiente.
Ya en el pasado, en el último Pacto del año 1995, la Coparmex ha dado testimonio
con la abstinencia de su firma, de la inviabilidad de los Acuerdos que no resultan
de un verdadero diálogo social. Que se hacen apresuradamente y cuyos efectos
son muy limitados.
Los mexicanos necesitan urgentemente un liderazgo que ponga la mirada en los
temas relevantes, que con serenidad los afronte sin miedo, con cambios de fondo,
que genere consensos sociales en todos los sectores. Que verdaderamente
coloque a México como prioridad.