Oaxaca.-Los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO) informan que de acuerdo con el Sistema Único de Información de Vigilancia Epidemiológica (SUIVE), se reportaron en San Mateo del Mar ocho casos de Hepatitis “A”, en el Istmo de Tehuantepec región que resultó severamente afectada por los terremotos del 7, 19 y 23 de septiembre. La dependencia informa a través de un comunicado que ya se les dio tratamiento oportuno y seguimiento del diagnóstico, por lo que no representan una emergencia epidemiológica. Indica que personal operativo realizó en este municipio istmeño acciones intensivas, donde se estableció un cerco epidemiológico con visitas domiciliarias para descartar brotes de este padecimiento en la población. De igual manera, se desplegó una brigada para el fortalecimiento de estrategias con especial énfasis en Regulación Sanitaria como vigilancia estrecha de los niveles de cloración de agua en los pozos de las localidades aledañas y de los hogares en el municipio de San Mateo del Mar, mediante personal de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris). Aunque el boletín señala que el primer caso se registró en agosto del 2017 y el último el 27 de septiembre de este año, no menciona si se trató de las últimas semanas, pero aclara que los pacientes que está en proceso de recuperación. La Hepatitis “A” es una virosis hepática que se transmite por la ingestión de alimentos o bebidas contaminados, así como por contacto directo con una persona infectada por el virus, casi todos los pacientes se recuperan totalmente, pero si no se atiende oportunamente puede complicarse y ser mortal. Entre los síntomas que se presentan son: fiebre, malestar, pérdida de apetito, diarrea, náuseas, dolor abdominal, coloración oscura de la orina e ictericia (coloración amarillenta de la piel y la esclerótica ocular). Aunque se exhorta a la población a lavarse las manos antes de comer y después de ir al baño, extremar la higiene a la hora de preparar los alimentos, hervir, clorar el agua o usar plata coloidal, los sismos dejaron a muchas personas sin vivienda y viven a la intemperie o en albergues.