Chilpancingo, Gro.- El gobierno de Héctor Astudillo Flores decidió quemar despensas y productos de primera necesidad que se echaron a perder porque fueron almacenados en bodegas que no cumplen con lineamientos para preservar víveres, ubicadas al sur de la capital guerrerense.
Según “Proceso”, los insumos incinerados por la administración de Astudillo fueron enviados a Guerrero por la Secretaría de Gobernación (Segob), a través del Fondo de Desastres Naturales (Fonden), para ser destinados a zonas donde cientos de familias perdieron su patrimonio tras las inundaciones y los sismos recientes, que dejaron un saldo de seis muertos y unas nueve mil casas afectadas.
Imágenes obtenidas por dicho medio indican que los productos alimenticios, así como cientos de colchonetas y cobertores están almacenados a la intemperie en un terreno privado, ubicado sobre el bulevar Chilpancingo-Petaquillas.
En este lugar, que no cumple con los lineamientos de preservación y cuidado de alimentos, trabajadores de la Secretaría de Protección Civil estatal, que dirige Marco Mayares Salvador, quemaron cientos de despensas, así como productos de primera necesidad que no fueron entregadas a familias damnificadas, porque las autoridades locales decidieron almacenarlas y prácticamente se descompusieron, informaron fuentes oficiales que pidieron el anonimato por temor a sufrir represalias.
Indignación Predio
“Proceso” informó el viernes que el gobierno de Guerrero almacenaba las despensas.
Arrendamiento
Según investigación de dicho medio, el predio es arrendado por el gobierno estatal y pertenece a un empresario, por un pago mensual de 150 mil pesos.
No fija postura
Tras darse a conocer el caso de la acumulación de ayuda, la administración de Astudillo no fijó una postura sobre este hecho.
Con información de Proceso.