Fortino TORRENTERA O.
Oaxaca.- A pesar de los acuerdos de pacificación, la región de Chimalapas sigue siendo una zona sin ley donde los intereses económicos y políticos están provocando la constante violación a los derechos humanos de los comuneros originales.
Tal es la denuncia de Pedro Santíz Girón, comunero de Congregación “Nuevo Jerusalem” de Santa María Chimalapa, quien con su familia fue encarcelado, maltratado y amenazado para desistirse de su condición de comunero.
La denuncia dirigida a la Asamblea se Santa María Chimalapa, a su Comisariado de Bienes Comunales, al gobernador del Estado y a instancias defensoras de los Derechos Humanos en Oaxaca y el país, pide actual contra los actos arbitrarios de la autoridades del núcleo agraria “Cal y Mayor”.
Detalló el denunciante que el pasado domingo 30 de julio, el comisariado de Cal y Mayor convocó Asamblea a la mañana azusando al pueblo para amenazar a la mamá de éste, de nombre, Antonia Girón Guzmán, con el fin de prohibirle abastecerse en la tienda Diconsa y prohibirle el servicio de la caseta telefónica del lugar.
Lo anterior se lo atribuyó a las acciones de defensa del territorio de chimalapa de la congregación comunal “Nuevo Jerusalem”, donde han utilizado a indígenas tzeltzales y tzotziles con engaños del gobierno de Chiapas, tras ser aceptados como comuneros chimalapas en la conciliación de 1994.
Explicó que su mamá al ser acosada con las referidas prohibiciones, se presentó a protestar ante el comisariado de Cal y Mayor, siendo entonces detenida en la cárcel, junto con su hermana menor, Lucía Peréz Girón de 4 años, por lo que al presentarse para ser liberadas, Pedro Santíz fue encarcelado, siendo acusado y maltratado por ser traidor a Chiapas por ser comunero chimalapa.
“En la noche de ese domingo 30, el comisariado llamó al pueblo y los azusó para que fueran al solar que ocupaba mi mamá, saqueando su casa, destruyéndola y quemándola, robándose dinero, ropa, televisión, refrigerador y muebles”.
“A la una de la mañana del 31 julio, nos bajaron esposados a mi mamá, a mi hermanita y a mí, a la ciudad de Cintalapa, Chiapas, donde nos entregaron a la Comandancia Policía de esa ciudad, donde fuimos liberados como a las 6 de la mañana por no existir delito nuestro alguno”.
Comentó que mientras eso sucedía, el comisariado Cal y Mayor fue a ver autoridades comunales de Nuevo Jerusalem, amenazándolos para que dejen de ser de Chimalapas y no vuelvan a admitir a Pedro Santíz y su familia para que no se abastezcan en Diconsa, prohibirles el uso de la caseta telefónica y que no puedan usar las camionetas colectivas que llevan pasaje a la ciudad de Cintalapa.
Agregó que además amenazó el comisariado de Cal y Mayor, de encarcelar y desalojar por fuerza a la activista Carmen López López y a su familia, acusándolo de ser el principal traidor a favor de chimalapas y contra Chiapas.
Señaló directamente a los líderes Oscar Gordillo, Alberto Morales Velázquez, Hiram Gordillo Pérez y Odilón Velázquez Guzmán que manejan al comisariado de Cal y Mayor y quienes están muy enojados y asustados por la posibilidad de que los comuneros chimalapas actúen en defensa del territorio comunal.
Por ello, solicita la intervención de las autoridades oaxaqueñas, así como de las instancias que velan por el respeto a los derechos humanos ante este caso que se plantea como de grave violación.