Fortino Torrentera O.
Oaxaca.- Este día a nivel mundial se conmemora Día Mundial de Toma de Conciencia del Abuso y Maltrato de la Vejez, momento que debemos reflexionar sobre la relación y protección a las personas de la tercera edad, siendo México un país donde crece esta población en condiciones paupérrimas y bajo el edadismo.
Según las proyecciones del Consejo Nacional de Población (Conapo), la población de la tercera edad (mayor de 60 años) en México se mantendrá en continuo crecimiento, aumentando 76.3 por ciento de 2000 a 2015; el número de los adultos mayores del país más que se cuadruplicarán al pasar de 6.9 millones en 2000 a 36.5
En una reciente indagación de Parametría, seis de cada 10 encuestados respondieron que ven a los personas de la tercera edad “como una carga”, mientras que 48 por ciento respondió que los hijos no se ocupaban de sus padres cuando estos envejecían.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), entre el 4% y el 6% de los adultos mayores han sufrido alguna forma de abuso, ya sea físico, financiero o emocional. Tales actos son "inaceptables a la dignidad humana y a los derechos humanos".
A través de la resolución 66/127 de diciembre de 2011, las Naciones Unidas explica que el 15 junio de cada año, todo el mundo expresa su oposición a los abusos y los sufrimientos infligidos a algunas de nuestras generaciones mayores.
El maltrato al adulto mayor no es más que un acto único o repetido que "causa daño o sufrimiento a una persona de edad, o la falta de medidas apropiadas para evitarlo, que se produce en una relación basada en la confianza".
La violencia no es nada más física, también puede ser psíquico, emocional o sexual, y el abuso de confianza en cuestiones económicas. También puede ser el resultado de la negligencia en su cuidado- atención, sea esta intencional o no.
En algunos países el maltrato a ancianos es considerado un tema tabú o pasa desapercibido, hasta hace poco, este grave problema social se oculta a la vista de la sociedad o se consideraba como un asunto extremadamente privado; Sin embargo, cada día hay más indicios de que el maltrato al adulto mayor es un importante problema de salud pública y de la sociedad.
Tan solo en unos pocos países desarrollados hay tasas de prevalencia o estimaciones, que se sitúan entre un 1% y un 10%. Aunque la magnitud del maltrato de los ancianos se desconoce, su importancia social y moral salta a la vista. En tal virtud, exige una respuesta mundial multifacética que se centre en la protección de los derechos de las personas de edad.
Las formas de definir, detectar y resolver el maltrato de los ancianos tienen que enmarcarse en el contexto cultural y considerarse junto con los factores de riesgo que tienen una especificidad cultural.
¿Qué es el edadismo?
El edadismo es la existencia de estereotipos y conductas discriminatorias hacia las personas en razón de su edad. Es un problema extendido e insidioso que afecta negativamente a la salud de las personas mayores.
Se trata de actitudes que los ancianos enfrentan a diario. Se les excluye del mercado de trabajo, se restringen los servicios sociales a los que pueden acceder y se les presenta en los medios de comunicación mediante estereotipos. En definitiva, el edadismo margina y excluye a los ancianos de su comunidad.
Las personas mayores que se ven como una carga para los demás pueden acabar pensando que su vida tiene menos valor y, como consecuencia de ello, son más proclives a la depresión y el aislamiento social.
No es necesario un día al año para pedir respeto y consideración para las personas mayores, recordemos que la vida es un ciclo y aunque quizás ahorita seas joven y sientas que cuentas con la energía suficiente, mañana serás anciano y también vas a requerir amor, respeto, consideración y atención.