Oaxaca.-Solo uno de cada 10 pacientes con cáncer de pulmón en México puede ser curado debido a que el resto llegan muy tarde al diagnóstico, señaló en un comunicado el doctor Jerónimo Rodríguez Cid, investigador principal de estudios clínicos del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER).

El especialista explicó que 90 % de los pacientes diagnosticados con cáncer de pulmón en el país tienen una enfermedad metastásica. “Es una enfermedad muy agresiva y el diagnóstico tardío la hace incurable”, señaló.

El cáncer de pulmón tiene una alta incidencia y es el más mortal del mundo.

Esto se debe, dijo, a que “no hay un estudio previo (tamizaje) que lo permita diagnosticar tempranamente, salvo casos específicos”.

Por ejemplo, hay un tamizaje para pacientes altamente fumadores, que son aquellos que consumen más de 30 cigarrillos al día, y mayores de 50 años.

“En ellos se puede hacer una tomografía de baja dosis, y ese estudio ha permitido tener un diagnóstico más temprano del cáncer de pulmón, aunque es muy poco frecuente este hallazgo”, dijo.

Explicó que para salvar una vida con ese tamizaje se tienen que hacer aproximadamente 300 tomografías y más de 180 procedimientos invasivos.

Además, es un estudio mucho más costoso que lo que confiere un antígeno prostático para cáncer de próstata, un papanicolau para un cáncer cérvico uterino y una mastografía para cáncer de mama, agregó.

Otro problema es que no hay forma de diagnosticar el cáncer de pulmón por signos y síntomas, ya que varios de ellos son comunes y frecuentes en diferentes padecimientos, explicó.

Una vez que se hace el diagnóstico, no hay forma de predecir cuánto tiempo aproximado vivirá el paciente.

Acerca de los factores de riesgo para desarrollar cáncer de pulmón, destaca el tabaquismo, pues 80 % de los pacientes con cáncer de pulmón son fumadores.

Otros factores son la exposición al humo de leña (frecuente en comunidades rurales), al asbesto y la contaminación, así como la genética.

Dijo que hay diferentes subtipos de cáncer de pulmón, como el adenocarcinoma, que es el más común, “sobre el cual sabemos que el 40 % de los pacientes mexicanos no tienen historia de tabaquismo y tienen una alteración genética no hereditaria”.

El especialista explicó que actualmente hay tres grandes pilares para el tratamiento: la cirugía, la radio oncología y el tratamiento de oncología médica.

Destacó también que existen nuevas tecnologías de tratamiento: la quimioterapia, las terapias blanco y la inmunoterapia.

“Hoy tenemos posibilidades de saber qué paciente va a responder a determinado tratamiento”, concluyó el experto.

Con información de EFE