Oaxaca.-El gobierno federal presentó el Plan Conjunto de Atención Instalaciones Estratégicas de Petróleos Mexicanos (Pemex), con el que combatirá el robo de hidrocarburos en pequeña y gran escala, delito que el año pasado dejó perdidas por más de 60 mil millones de pesos.

El presidente Andrés Manuel López Obrador, detalló que en el llamado "huachicoleo" la delincuencia organizada se apropió de más de 600 pipas de 15 mil litros al día, lo que significó pérdidas de alrededor de 200 millones de pesos diarios.

Advirtió que en 80% del robo de combustible participan funcionarios de la empresa mexicana, por lo que también se removerá a los involucrados. El resto del hurto se logra con la ordeña de ductos.

"Hay la hipótesis de que, de todo el robo, solo el 20% se da con la ordeña de ductos, que es una especie de pantalla, que la mayor parte tiene que ver con un plan que se opera con la complicidad de autoridades y con una red de distribución", mencionó.

En conferencia matutina, el mandatario detalló que el "huachicoleo" se apoya de un sistema de distribución" del que los antiguos directores de Pemex sabían que se cometía, pues "contrataban con sistemas para la vigilancia de ductos, para medir la presión de ductos, era casi del dominio público".

"No estamos hablando del llamado huachicol, sino de un plan que tiene vinculación al interior del gobierno y que se apoya con un sistema de distribución de combustibles, porque no es fácil vender 600 pipas diarias de gasolina. Para tener una idea, con lo que se han robado este año alcanzaría para financiar 40% de una refinería o, para ponerlo en otros términos, tres años de robo de combustible es equivalente a una refinería nueva”, aseguró.

López Obrador dijo que desde el pasado 22 de diciembre, cuando se aplicó el plan, tres funcionarios fueron separados de sus cargos y se les inició una investigación, aunque por ello, los datos se deben manejar con secrecía.

Al respecto, el procurador Alejandro Gertz Manero detalló que estas medidas se tomaron luego del análisis de PEMEX Logística, en donde se determinó que había complicidad desde dentro para permitir que en el ducto siguiera fluyendo el combustible para podérselo robar.

"Es realmente el trabajo más importante que ha hecho la nueva administración de Pemex para poder evitar algo que parecía que únicamente era el hecho de que alguien se acercaba a un ducto y le extraía el combustible", expresó.

Las cifras

El mandatario afirmó que el año pasado se robaron 600 pipas diarias, por lo que el plan es necesario y urgente ya que la fuga de dinero público es equiparable al presupuesto que se destina a la UNAM y que desde el 2000 ya se aceptaba oficialmente que se robaban 12 mil millones de pesos y ahora se habla de más de 60 mil millones de pesos producto del robo, es decir, alrededor del 10% de la producción petrolera.

Con información de Públimetro