Ciudad de México.- La Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos (CMDPDH) publicó el informe Huellas imborrables: desapariciones, torturas y asesinatos por instituciones de seguridad en México (2006 - 2017), que analiza los crímenes cometidas por instituciones de seguridad durante el periodo comprendido por la llamada “Guerra contra las drogas”, iniciada a raíz de la estrategia de seguridad de la administración del expresidente Felipe Calderón en diciembre de 2006, y continuada por Enrique Peña Nieto.
Debido a la naturaleza de los documentos analizados —recomendaciones de la CNDH cuya competencia se extiende al ámbito federal— los principales hallazgos sobre las violaciones perpetradas se centran en las Fuerzas Armadas de México y Policía Federal. En 7 de cada 10 documentos, los perpetradores de los crímenes fueron elementos de las Fuerzas Armadas de México (FAM).
60 recomendaciones narran casos de desaparición forzada, sumando un total de 239 víctimas. El 71.7% de estos casos fueron perpetrados por elementos de las FAM.
148 recomendaciones se refieren a casos de tortura, que suman 527 víctimas, de las cuales, 389 fueron torturadas por elementos de las FAM. Es importante señalar que 252 víctimas, es decir el 47.8%, fueron torturadas en el interior de instalaciones militares (cuarteles, bases o campamentos).
75 recomendaciones documentan asesinatos cometidos por agentes de seguridad del Estado. En total, se contabilizaron 270 víctimas de ejecución. Las FAM fueron identificadas como el principal perpetrador de estos asesinatos en el 61% de las recomendaciones en cuestión.