Fortino TORRENTERA Oaxaca. El 1 de marzo es el “Día Internacional para la Cero Discriminación”, el 21 de marzo se conmemora el “Día Internacional contra la Discriminación Racial” y el 31 de marzo, el “Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación racial”. Siendo Benito Juárez el primer presidente indígena mexicano, detrás de su figura, la discriminación está latente hasta nuestros días. Una de las primeras formas de discriminación en la conquista, fue el uso despectivo de la palabra “Yope” que originalmente corresponde a indígena prehispánica asentada en los límites de Guerrero y Oaxaca, cuyo pueblo no fue conquistado, pues se sabe que hasta el último yope fue ultimado por los españoles, que al avanzar hacia los Valles Centrales, llamaron así a quienes se oponía, a los que consideraron “indios ladinos”, por lo que el vocablo se instituyo como ofensivo en Oaxaca. Uno de los grandes maestros de la plástica oaxaqueña, Virgilio Gómez Ramírez (1936-2006), retomó al “Yope” para hacer un juego de palabras que lo mismo expresaba ingenuidad o desconocimiento, que un profundo arraigo oaxaqueño. Virgilio se autocriticaba como el “Yopor” o el “Yope mayor” y decía a los demás “No seas como yo era antes… Yoporux”. Va este número dedicado al maestro recordándolo con su arte que irrumpió como nadie en Oaxaca. Así también se recuerda al pianista, trompetista y miembro fundador del grupo de jazz de la UABJO, Jorge Fernando Hernández y su grupo Yope Power, grupo pionero que experimentó con un sonido netamente oaxaqueño y composiciones propias, para constituirse como una de las glorias del jazz local. Hace una década que el término “Yope” fue sustituido en Oaxaca por la invasión del “Naco”, no sólo haciendo más pronunciados los status sociales, sino que se empleó para discriminar, más que peyorar. En marzo, “El Medio” dedica sus páginas a entender el amplísimo universo que implica la discriminación presente en prácticamente todas las actividades del hombre, donde podemos discriminar sin saber que somos discriminados, pero además haciendo una reflexión como oaxaqueños, que ser “Yope” no es despectivo, sino un sinónimo prehispánico de la primavera, como lo ha indagado el investigador, Juan de Dios Gómez Ramírez, hermano del maestro Virgilio. Se trata de conocer la línea delgada de la discriminación que se ha institucionalizado en nuestro país, pero bien podemos decir que hay “yopes” en todo el mundo, a su manera; lo que es reprobable, es la retorcida intención de discriminar, un acto que atenta contra el derecho humano. Este número contará además con el suplemento “Mexcalli” con tips para los mezcólogos y productores de agave, así como cada número seriado participará en la rifa del libro: “Juárez en la Poesía” con la compilación y notas de Vicente Magdaleno y donado por la Secretaría de Cultura Con motivo del bicentenario.