Oaxaca.-Al exhortar a los impartidores de justicia a tener una comunicación directa con la persona que presente una discapacidad involucrada en juicio para así conocer su postura, sus necesidades y deseos, el asesor de la Dirección General de Estudios, Promoción y Desarrollo de los Derechos Humanos de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Gerardo Villegas Martínez, dijo que “la discapacidad está en la sociedad, no en la persona. La discapacidad es una diversidad funcional que enfrenta una barrera que no puede romperse”, refirió.
Villegas Martínez impartió el taller “Los derechos de las personas con discapacidad y el acceso a la justicia”, organizado por la Dirección de Derechos Humanos del Poder Judicial del Estado (PJE) donde expuso la necesidad de que los y las juzgadoras primero reconozcan las barreras que enfrentan las personas con cualquier tipo de discapacidad para así dictar una sentencia justa y adecuada a la realidad de cada individuo.
Luego de resaltar la preocupación del titular del PJE, Magistrado Raúl Bolaños Cacho por impulsar estos talleres, comentó que el lenguaje es trascedente para hacerlos visibles y respetar sus derechos puesto que se debe nombrar la realidad de manera clara, sencilla, sin prejuicios y buscando que al dictar sentencia se pueda dejar antecedente que fortalezca a este grupo vulnerable.
“El lenguaje es la forma más básica y cotidiana de discriminación. No se debe utilizar un lenguaje infantil o lleno de estereotipos. Una persona con discapacidad no sufre, no padece, no es víctima de algo. Debemos hacer un análisis antes de utilizar un lenguaje no apropiado. Pensemos que no se padece de ser hombre, no se padece ser mujer, no se padece ser niño y no existen las personas normales”, apuntó Villegas Martínez en la Biblioteca “Fray Francisco de Burgoa”, sede del evento.
Exhortó a los impartidores de justicia a tener una comunicación directa con la persona que presente una discapacidad involucrada en juicio, para así conocer su postura, sus necesidades y deseos, porque se debe tener claro que el individuo tiene la capacidad de ser independiente, autosuficiente y de tomar decisiones
“Es importante que se pueda identificar qué tipo de discapacidad tiene la persona, si es física, mental, intelectual o sensorial, así como sus características. Dependiendo de la discapacidad se puede designar qué grado de apoyo requiere para la vida cotidiana y en qué situaciones; no es necesario un tutor que se convierta en la persona, simplemente un sistema de apoyo que permita desarrollarse plenamente”, refirió.
Agregó que se debe dar “el reconocimiento de la discapacidad como parte de la diversidad humana y hacer cumplir el derecho de vivir de forma independiente y ser incluidos en la comunidad, siempre con el precepto de nada de nosotros sin nosotros; es decir, que al abordar un tema de discapacidad se debe incluir a personas con discapacidad porque son quienes conocen su realidad”.