Alberto UNDA
Oaxaca.- Preocupante para una sociedad maniatada por los partidos políticos, es ver cómo ahora, además se han convertido en basureros electorales. Morena el partido de la esperanza, es al que más se le tiene que reprochar porque las decisiones de Manuel López Obrador de levantar podredumbre príista, le hará perder al pueblo mexicano la oportunidad del cambio.
Ya es sabido que en la coalición “Por México, al frente”, el PRD se convirtió en el lacayo del PAN, cuando las diferencias más de ambición política y económica que ideológicas, comenzaron a fisurar a lo que en realidad, nunca fue una izquierda vigorosa en el país.
Desquebrajados con igualmente actos de corrupción de dirigentes, gobernadores y representantes populares así como la salida de protagonistas de estas inmoralidades, han hecho del sol azteca una caricatura entre el sistema partidista nacional ya nivel local, una vergüenza.
En Oaxaca, el amasiato PAN-PRD, es un caso singular, porque ambos partidos se necesitan mutuamente para sobrevivir, ya ni siquiera para competir y que sus burocracias, no así sus militancias, sigan teniendo canonjías económicas vía prerrogativas.
El PRD, por ejemplo postuló a un Manuel García Corpus cuya carpeta de corrupción debería estar abierta en la Procuraduría General de la República, luego de los millonarios desvío que realizo este priista en la SAGARPA.
Con un dirigente como Raymundo Carmona Loredo que cohabita con el PRI desde que traicionó los ideales de “la izquierda” y vende candidaturas al por mayor como su amigo Alejandro Avilés Álvarez, necesita de un compinche igual que él para que le sirva de tapadera y no perder tanto el próximo 1 de julio.
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Samuel Gurrión salvavidas del PAN-PRD?[/caption]
Y quien más que el PAN, cuya dirigente, Natividad Díaz no ata ni desata al frente de un fantasmal blanquiazul cuya militancia son las familias de los integrantes del comité ejecutivo estatal.
De tal suerte, que con Samuel Gurrión Matías, como candidato a la presidencia Municipal de Oaxaca, el PAN asegura votantes seguidores del recién renunciante al PRI y que también están inconformes por la forma tan degradante de hacer a un lado a la militancia tricolor.
En Morena, ni que decir, los priistas Carol Altamirano y Eva Diego Cruz, ahora son postulados para diputados federales, tras dejar al PRD que les dio para enriquecerse en los últimos años con cargos populares sin merecerlos,
El hecho es que ahora sí la ciudadanía deberá mostrar su inteligencia y sentido común para hacer un cuidadoso ejercicio de selección natural para llevar a cargos populares a quienes roben menos o los menos peores y obligar a los partidos a sanarse para eliminar a las y los corruptos que va recogiendo en cada elección.
Hasta ahora es el mecanismo más viable y pacífico para comenzar a desactivar al partidismo corrupto de México.
Con González Ilescas, el PRI en picada
Sin saber de qué partido es presidente, el nuevo dirigente Jorge González Ilescas al día siguiente de su toma de protesta como presidente del Comité Ejecutivo del PRI en Oaxaca, se aventó la puntada, de afirmar que “unidos, los priistas son invencibles”.
Representante fiel de ese priismo fiel a saquear pero de bajo perfil, González Ilescas, ignora la crisis de su partido hundido por sus cada vez más cínicos y voraces actos de corrupción de su militancia, ya sea en cargos de elección popular o de la función pública, aunado al descarado dedazo para imponer a un candidato que solo podrá ganar a la mala y con fraude electoral.
Dedicado a publicar tuits, de “buenos días Oaxaca”, González Ilescas demuestra también su bajo perfil político para dirigir a su partido que se desmorona entre la falta de moral y credibilidad social.
Muchos priistas saben desde ahora que en Oaxaca el tricolor no ganara gran parte de los cargos populares en juego, tan es así que la mayoría de los candidato y candidatas, se debieron de alinear para pagar el favor de haber lucrado en un puesto en el gabinete de Alejandro Murat.
Así que el PRI con González Ilescas y Mariana Nassar Piñeiro, solo sirven de parapeto por su historial mediocre como militantes, uno que estuvo becado en el CNOP y la otra como aprendiz de política y que hasta antes de renunciar al DIF, no se sabía que era priista, haciendo a un lado a la militancia tricolor de hueso colorado.
Con González Ilescas el sector popular priista, está prácticamente desaparecido en Oaxaca cuando éste era está el brazo fuerte del acarreo y parte vital del voto duro con la manipulación de comerciantes, gremios de profesionistas, colonos, taxistas, artesanos, entre muchos otros y antes conformaban lo que eran las clases media-alta, media y baja oaxaqueña, pero que actualmente están condenadas a la pobreza y miseria dejada a golpe de gasolinazos.
Esta falta de liderazgo local se agudiza con otro parecido al PRI nacional, en el que Enrique Ochoa Reza, al Igual que González Ilescas viven en su realidad de jauja electoral y de saqueo de las prerrogativas partidistas,
De tal grado es el autoengaño de ambos dirigentes, que sus afirmaciones son de atar, Ochoa Reza con sus “prietitos que no aprietan” y González Ilescas con su “unidad tricolor”.
¿Qué festeja el PRI?
Por cierto hoy el PRI, cumple 89 años de su fundación y en previsión de que Ochoa Reza, vaya salir con alguna frase célebre, el único orador en la ceremonia conmemorativa, será, José Antonio Meade Kuribreña, el candidato que va diluyendo su marketing ciudadano para develar su verdadero corazón tricolor.
El primer priista del país, Enrique Peña Nieto, pese a su arrogancia y protagonismo, parece finalmente se dio cuenta, que si quiere que su “destapado”, José Antonio, salga del bache donde tiene su campaña presidencial, debe tener espacio para intentar un despegue, por lo que anunció, no acudirá a la ceremonia priista, fiesta a la que en los últimos cinco años, no dejó de asistir, porque tenía los reflectores para él solo.
El candidato cada vez más priista, tiene pues el reto de convencer primero a la militancia del tricolor y luego a toda una nación de que es la mejor opción, situación que se vislumbra imposible si se toma en cuenta su decepcionante equipo de campaña cuyo rastro de enriquecimiento, corrupción e impunidad lo acompañaran en los próximos tres meses.
Colosio más vigente que nunca
Meade Kuribreña, por desgracia está muy lejos de revivir al PRI con el engaño de su candidatura ciudadana, porque para el país, quedó claro que el grupo Atracomulco nunca permitirá que ideales en defensa de la Nación, perturben su bonanza política y económica a costa del saqueo de los bienes y riqueza del pueblo mexicano.
A la sociedad mexicana, también le quedó claro que hasta ahora, el único candidato ciudadano que tuvo el PRI fue Luis Donaldo Colosio Murrieta. Y no lo dejaron pasar.
En ese memorable discurso, pronunciado el 6 de marzo de 1994 en el emblemático Monumento a la Revolución, con un discurso memorable, el sonorense, rompió con la forma en que los dueños del poder público asolaban a la ciudadanía a la vez de tratar de implantar la “sana distancia” con el presidente en turno.
Esta osadía y desafío al ex presidente Carlos Salinas de Gortari, le costaría la vida a Colosio Murrieta, 17 días después de iniciar su campaña en un artero atentado al terminar un mitin en Lomas Taurinas, en Tijuana Baja California.
Hoy su hijo, Luis Donaldo Colosio Riojas, se ha registrado como candidato a diputado federal por el Partido Movimiento Ciudadano, mostrando su rechazo al PRI que su padre quiso cambiar y con ello darle un rumbo de transformación distinto cuando vio a un México como el que vivimos hoy con hambre, con saqueo y con injusticia.
El pilón: Por cierto se está en espera de que se oficialice la candidatura de Raúl Bolaños Cacho Cué al Senado de la República impulsada por el Partido Verde Ecologista.
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