Oaxaca.-Cada año crecen las agresiones en contra de periodistas y son más violentas y cínicas, Ana Ruelas directora de “Artículo 19”, (organización fundada en 1987, que internacional que defiende la libertad de expresión y el derecho a la información) sostuvo, en el marco del Día de la Libertad de Expresión en México, este 07 de junio.
Tan sólo en 2017, sostuvo, se documentaron más 500 agresiones, un número histórico, y en los primeros cinco años del gobierno de Enrique Peña Nieto se registraron mil 986 agresiones. En ese sentido, la activista expresó que no hay nada que celebrar, ni hablar de libertad de expresión en el país, mientras existan niveles de violencia y otros mecanismos que laceran la actividad periodística. De igual forma, la directora de Artículo 19 consideró que será difícil que Veracruz deje de ser uno de los estados más complicados para ejercer la actividad, porque en la entidad se instaló el silencio.
“A pesar de los esfuerzos de la CEAPP las agresiones no han cesado como son los casos de Arely Hernández y Raymundo León; exigimos a la FGE que investigue, pues esto no puede seguir sucediendo”, acusó. En cuanto a cifras, Ruelas destacó que durante 2018 se han registrado cuatro asesinatos vinculados con la labor periodística (aunque la prensa nacional registra al menos 7 casos en lo que va del año). En 2017, reitera que se documentaron 507 agresiones, un número histórico, ya que cada vez se registran más y son también más violentas y más cínicas.
“Los asesinatos y desapariciones se llevan a cabo a la luz del día y esto refleja la impunidad a la que se enfrenta la prensa y ante un Estado que no investiga de manera exhaustiva las agresiones “, acusó, y enunció que de las mil 986 agresiones registradas durante el actual sexenio, el 48 por ciento provienen del Estado mexicano, además de que existe impunidad por parte de la autoridad en la no solución de los delitos en contra de los comunicadores.
“La impunidad es una forma de agresión”, sostuvo. En ese tenor, Ana Ruelas señaló que se requiere una revisión de leyes y acuerdos parlamentarios para mejorar las condiciones laborales de los comunicadores. “Se tiene que garantizar la corresponsabilidad de las casas editoriales con sus periodistas y que el ejercicio periodístico se pueda ejercer en un terreno limpio, sin criminalizaciones a través de la injuria, la calumnia, la difamación, y otros”, expuso.
Concluyó que hay mecanismos civiles muy complejos, que en lugar de enfocarse en informar a la sociedad, se tienen que enfocar en defenderse, por tanto, consideró que deben hacerse cambios en las leyes mexicanas.