Oaxaca.-El año que concluye fue tanto exitoso como emblemático para el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), ya que estuvo caracterizado por la conmemoración y la celebración del 80 aniversario de su creación, ocurrida por decreto constitucional del 3 de febrero de 1939.
Fueron diversas las actividades expositivas, de investigación y de difusión que desde el Instituto se llevaron a cabo para rememorar su fundación y su continuo trabajo en favor y en defensa del patrimonio histórico, arqueológico, paleontológico, lingüístico y cultural en general de México.
Del mismo modo fueron numerosos los reconocimientos que, a lo largo de 2019, se concedieron al INAH desde otras organizaciones privadas, gobiernos estatales, municipios y otras dependencias de la administración pública federal.
Así se llevaron a cabo sesiones solemnes en congresos de estados como Campeche, Ciudad de México, Estado de México, Guanajuato, San Luis Potosí, Sinaloa, Sonora y Zacatecas, en las que diputados, alcaldes, gobernadores y otros participantes políticos de la república, evocaron la labor diaria del INAH y de sus colaboradores.
Otras distinciones estuvieron, por ejemplo, en la calidad de invitado especial que se dio a la institución dentro de la XIX Feria Internacional del Libro (FIL) del Zócalo de la Ciudad de México; encuentro librero que, del 11 al 20 de octubre, también desplegó la exposición temporal 80 años del INAH, esbozo de una historia, integrada por 33 imágenes icónicas en el devenir histórico del organismo.
Esta muestra –compuesta por datos estadísticos, numeralias y acontecimientos relevantes para la historia de la dependencia y de México– itineró igualmente por sedes como el nuevo Palacio Legislativo de Guanajuato y las estaciones Copilco y Auditorio del Sistema de Transporte Colectivo Metro, en la capital del país.
El INAH también fue objeto de un reconocimiento especial, como parte de la que, a su vez, fue la 1ª Feria Internacional del Libro de la Cámara de Diputados, llevada a cabo en abril.
Alcaldías de Cuauhtémoc y Tlalpan, llevaron a cabo en sus espacios públicos y museos, talleres, conferencias con investigadores del INAH como invitados, así como exposiciones temporales para festejar la efeméride.
Del mismo modo, la Lotería Nacional para la Asistencia Pública, celebró al INAH con su Sortero Mayor número 3708, realizado el 16 de abril.
La historia del Instituto, en libro conmemorativo
Un recuento de los antecedentes históricos del INAH, desde su gestación bajo el proyecto nacionalista del general Lázaro Cárdenas y el inicio de sus funciones, en 1939, como parte de la Secretaría de Educación Pública (SEP), hasta sus épocas recientes, marcadas por acontecimientos como su incorporación, en 2015, a la Secretaría de Cultura, es la guía del libro Instituto Nacional de Antropología e Historia. 80 años.
Presentado en las ferias internacionales del libro de Antropología e Historia (FILAH) y de Guadalajara, este volumen reúne 15 artículos, escritos por reconocidos investigadores y funcionarios, pasados y presentes del INAH, como Pedro Francisco Sánchez Nava, coordinador nacional de Arqueología, o bien, por el escritor Antonio García de León; asimismo, y se antecede por un proemio autoría de la secretaria de Cultura del Gobierno de México, Alejandra Frausto Guerrero.
“El INAH se ha enfocado en documentar, esclarecer y ponderar las múltiples identidades de nuestra nación, acreditando la diversidad de culturas, lenguas, historias y universos simbólicos de ese mosaico heterogéneo que es México”, declaró el antropólogo Diego Prieto, director general del INAH, al encomiar durante la primera presentación del texto, hecha en octubre, las numerosas voluntades que han construido al Instituto.
Cerro de las Ventanas y Mixcoac: nuevas zonas arqueológicas de México
No menos importante en el recorrido anual de la institución, son las dos nuevas zonas arqueológicas que en 2019 abrieron sus puertas, con las cuales la red de estos sitios patrimoniales llega a 194 zonas abiertas a la visita pública. Se trata de: Cerro de Las Ventanas, en Zacatecas, inaugurada el 2 de agosto; y Mixcoac, en la Ciudad de México, cuya apertura se formalizó el pasado 25 de agosto.
Cerro de las Ventanas recibe su nombre por un vestigio prehispánico adaptado a un abrigo rocoso (de 12 metros de largo y 3.5 m de alto) localizado en la peña más alta del promontorio donde se ubica la urbe: un muro de piedra con recubrimiento de barro y algunos orificios o vanos que, a la lejanía, dan la apariencia de ‘ventanas’.
Junto con las zonas arqueológicas de La Quemada, Altavista-Chalchihuites y Cerro del Teúl, el proyecto integral de investigación y conservación Cerro de Las Ventanas contribuye a comprender la conformación durante la época prehispánica de lo que hoy es el sur de Zacatecas, en particular del periodo Epiclásico (600-1200 d.C.) y su florecimiento en el Posclásico (1200-1531 d.C.).
Mixcoac, en tanto, se convirtió en el quinto sitio arqueológico abierto al público en la Ciudad de México, junto con las zonas arqueológicas de Templo Mayor, Tlatelolco, Cerro de la Estrella y Cuicuilco.
Es uno de los sitios arqueológicos más pequeños del país (de siete mil 200 metros cuadrados), ya que está flanqueado por unidades habitacionales y vías como el Periférico, no obstante, se trata de un antiguo enclave con raíces de la época teotihuacana (400-600 d.C.), pero cuyos remanentes visibles pertenecen a su ocupación mexica (900-1521 d.C.).